Si has decidido convertirte en propietario de un vehículo de ocio, ya sea autocaravana o camper, conviene que estudies de forma exhaustiva las diferentes opciones que nos ofrece el mercado para elegir el modelo que mejor se adapte a tus necesidades.
Aunque la lista de conceptos que debemos tener en cuenta es, sin duda muy larga, daremos un repaso a las cuestiones más básicas que debes conocer.
Autocaravana o camper, cuestión de tamaño
La primera cuestión es decidir el tamaño del vehículo, lo que nos llevará a decantarnos por un camper, con un formato habitualmente más pequeño o de una autocaravana, teniendo en cuenta que el precio puede resultar muy similar entre ambos modelos.
En el caso de los camper de menor tamaño, la elección nos llevará a las diferentes terminaciones disponibles en las gamas California de Volkswagen o Marco Polo en el caso de Mercedes, a las que recientemente se han añadido las versiones realizadas sobre la furgoneta Custom de Ford o la Talento de Fiat, junto con las adaptaciones realizadas sobre modelos de Opel o Renault. Versiones todas que destacan por su funcionalidad, posibilidad de uso diario, maniobrabilidad y consumos reducidos.
A cambio pagamos el precio de disponer de un espacio habitable más reducido, tanto a la hora de viajar como de dormir y sufrir la carencia de una ducha, lavabo y WC, que deberán ser portátiles, salvo en los modelos de mayor formato realizados habitualmente sobre los bastidores de Fiat Ducato, Mercedes Sprinter o furgonetas similares.
Si optamos por una autocaravana lo primero que debemos plantearnos es cuántas personas viajarán habitualmente y si entre los tripulantes hay niños pequeños. Un dato importante no sólo por la ubicación que les daremos dentro del coche durante la noche, sino por la necesidad de espacio para transportar juguetes, sillas, bicis y demás objetos.
Diferentes tipos de autocaravana
En este caso, una autocaravana de tipo capuchina puede ser la solución ya que nos ofrece una cama enorme sobre la cabina, que tiene un atractivo especial para los niños por su apariencia de refugio abuhardillado.
Este formato de autocaravana permite la pernocta de hasta siete ocupantes, ya que los sofás del salón junto con la mesa, se convierten en camas dobles, mientras que en la parte trasera podemos disponer de una cama amplia en los modelos con garaje o de hasta tres literas.
Las autocaravanas perfiladas por su parte, ofrecen la ventaja de una mejor aerodinámica y menor altura, lo que simplifica su conducción al resultar menos sensibles al viento y también menos glotones de gasóleo.
La distribución interior puede ser la misma que en una capuchina e incluso contar con una cama recogida sobre el techo del salón, que se baja durante la noche.
Por último los modelos de autocaravana integrales, los estéticamente más atractivos dado que su aspecto de pequeños autobús, ofrece un poco más de espacio interior o al menos de volumen, pero por el contrario también resultan ruidosas por el sonido proveniente del motor que se encuentra dentro del habitáculo.
Autocaravanas según su espacio interior
En cuanto a la distribución interior, el mercado nos ofrece tantas alternativas como podamos imaginar, con salón y cocina en L, ducha y aseo juntos o separados, nevera de diferentes tamaños, asientos de cabina giratorios, todo en un vehículo de hasta 7,5 metros de longitud que es la distancia máxima que suelen tener las autocaravanas de hasta 3,5 TN de MMA, para poder ser conducidas con un carné tipo B.
La presencia de un garaje en la parte posterior, que suele contar con una cama en la parte superior, nos permitirá transportar de manera sencilla cosas voluminosas como bicis, moto, sillas de niño o el material de camping que necesitemos.
En cualquier caso, debemos pensar que cuanto mayor sea el tamaño del vehículo, más complicado será aparcar o acceder a ciertos pueblos y circular por carreteras comarcales o de montaña, algo que pondrá a prueba la pericia del conductor.
En lo que respecta a las cuestiones mecánicas, en estas versiones de hasta 3,5 TN de MMA toneladas que habitualmente circulan a plena carga, la elección de una potencia correcta resulta determinante, no sólo por la velocidad media que podamos conseguir en vía rápidas, sino por la respuesta que nos ofrecerá cuando afrontemos las empinadas rampas en el ascenso a un puerto de montaña.
Los modelos actuales, tanto de camper como de autocaravanas, ofrecen mecánicas desde los 130 hasta los 180 CV de potencia, con alternativas intermedias entre los 150 y 160 CV.
Normalmente el precio base del vehículo incluye la motorización más baja (130 CV), ofreciéndose los siguientes escalones con un sobreprecio en torno a los 1.500 euros, salvo en modelo de gama media-alta que suelen ir equipadas con mecánicas de 150 CV en adelante.
Tanto si se trata de un vehículo nuevo como de segunda mano, nuestra recomendación es no comprar un modelo con un motor demasiado raquítico, pues en poco tiempo intentaremos sacarle unas prestaciones que no va a poder ofrecernos y acabaremos circulando siempre al máximo de sus posibilidades, con los riesgos mecánicos que eso supone.
Otro de los elementos a considerar en el momento de la compra es el tipo de caja de cambios que incluimos en nuestro vehículo, pudiendo elegir entre accionamiento manual, automática o automatizada.
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