Opel Crossland X 1.6 Turbo D: superprueba al nuevo SUV con todos los datos

El nuevo Opel Crossland X comparte plataforma, motor, cambio y más ADN con coches del grupo PSA, al tiempo que mezcla virtudes de SUV y monovolumen: un modelo muy interesante.

Juan Carlos González. Twitter: @autopista_es Fotos: Israel Gardyn.

Opel Crossland X 1.6 Turbo D: superprueba al nuevo SUV con todos los datos
Opel Crossland X 1.6 Turbo D: superprueba al nuevo SUV con todos los datos

Se puede afirmar que el Crossland X es el primer Opel de la nueva era PSA, ya que en marzo se confirmó la compra de Opel por el grupo automovilístico francés que engloba a Peugeot, Citroën y DS. Pero, en realidad, este nuevo SUV que acaba de llegar a los concesionarios forma parte de los acuerdos firmados ya en 2012 por ambos constructores, cuando todavía eran empresas independientes. Entonces decidieron compartir plataformas, motores y cajas de cambio, de ahí que el Crossland X tenga cosas en común con el Peugeot 2008 o con el futuro Citroën C3 Aircross que se va a fabricar junto al nuevo Opel en Figueruelas (Zaragoza), en la emblemática planta de General Motors de la que han salido casi 13 millones de vehículos desde su inauguración en 1982.

Resulta curioso que estos lazos genéticos se noten ya desde el mismo momento en que recibimos la llave del Opel Crossland X, ya que se trata del típico mando a distancia de los últimos Peugeot, el mismo que recibiría el comprador de un 2008. Sin embargo, la propia imagen del nuevo SUV de Opel no daría pistas en ese sentido ya que los diferentes elementos de diseño ponen un claro contrapunto con sus «primos-hermanos» de PSA y definen el habitual aire de familia de la marca alemana, con un frontal personal, con su logo recién actualizado, y algunos rasgos exteriores que recuerdan al Adam: en particular su techo de estilo flotante sobre un perfil cromado, que puede ir en un color diferente al de la carrocería (negro, blanco o gris acero) dando un llamativo efecto bitono.Opel Crossland X  

Así es por dentro el Opel Crossland X

Al acceder al interior nos encontramos igualmente con una estética que evoca a las últimas creaciones de Opel. Los amplios reglajes facilitan una buena posición al volante, destacando el empaque de los asientos delanteros, que convence por mullido o por la forma de adaptarse al cuerpo —en nuestra unidad incluso con banqueta extensible—. La marca alemana lleva tiempo cuidando este aspecto y es algo que se termina agradeciendo con el paso de los kilómetros. Quizás no vamos tan altos como en otros SUV, pero sí se mantiene esa posición dominante frente a lo que nos rodea, que se ha convertido en uno de los valores más apreciados de estos modelos.

La presentación general del habitáculo es de buena factura. El diseño del salpicadero es algo clásico pero agradable a la vista, sobre todo si contamos con la pantalla táctil de 8 pulgadas. La terminación se realza con la utilización de material ligeramente acolchado en la parte superior y con detalles cromados en distintas zonas. Cuenta con bastantes huecos para dejar los objetos más cotidianos —los de las puertas no admiten botellas muy grandes— y la guantera está refrigerada. Hay mandos de control directo de la climatización y tomas USB en la parte inferior de la consola, donde puede llevar un sistema de carga por inducción (125 euros). El freno de estacionamiento es de palanca.

Con sus 4,21 metros de longitud, el Crossland X es 5 cm más largo que un Peugeot 2008 o 9 más que un Renault Captur. También es 7 cm más corto que su «hermano mayor» el Opel Mokka X, modelo que cuenta con motores más potentes, puede contar con tracción 4x4 y tiene un punto más de refinamiento, pero al que este nuevo SUV —que sólo es de tracción delantera— seguro que va a «robar» algunas ventas.

ESPACIO Opel Crossland X 1.6 Turbo D
Anchura delantera 136 cm
Anchura trasera 132 cm
Altura delantera 90-97 cm
Altura trasera 89 cm
Espacio para piernas 71 cm
Maletero 425 litros

Al medir el espacio de su habitáculo, vemos que el Crossland X se sitúa en la media de la categoría. En nuestra unidad, la altura al techo en las plazas traseras es su cota menos destacada, pero en parte se debe a que incorpora el techo opcional de cristal (915 euros), que resta algunos centímetros. Aun así, está al nivel del Peugeot 2008 o el Renault Captur. Un detalle a mejorar es la ventanilla lateral de custodia que no va integrada en la puerta trasera, lo que limita la anchura de entrada y salida del vehículo a la altura de la cabeza.

El maletero del nuevo Opel también es de los más amplios al compararlo con coches similares. El suelo de la zona de equipaje puede situarse en dos niveles. En el superior crea un doble fondo de unos 12 cm y está pensado para enrasar con los respaldos traseros si necesitamos que vayan plegados, creando una superficie de carga plana. Sólo los modelos que cuentan con una banqueta trasera deslizante pueden ofrecer más capacidad, pero esta cualidad también está disponible en el nuevo Opel si se solicita el Pack Versatilidad (350 euros), que permite desplazar los asientos posteriores de forma longitudinal hasta 15 cm. En este caso el volumen para equipaje puede aumentar en unos 100 litros y añadiremos un interior más modulable para algunas situaciones, como sucede en los monovolumen o como ocurría en el extinto Meriva, sustituido por este nuevo crossover. Interior Opel Crossland X

Opel Crossland X 1.6 Turbo D: su motor

Como decíamos al inicio, el acuerdo de desarrollo PSA/Opel sitúa bajo el capó del Crossland X los mismos motores destinados a 2008/C3 Aircross: en gasolina de 82 a 130 CV —los PureTech, en Opel rebautizados— y en Diesel de 100 o 120 CV —el 1.6 BlueHDi, aquí sin el habitual apellido CDTI de la marca y con un más impersonal Turbo D—. Eso sí, el pliego de condiciones permite a los ingenieros de Rüsselsheim realizar siempre su propia puesta a punto.

En el Crossland X, el motor turbodiésel de 120 CV hace notar su naturaleza al ralentí, pero una vez en marcha su rumorosidad pasa desapercibida. Su buena cifra de par ya se aprovecha desde bajo régimen, para ofrecer una respuesta global bastante progresiva y garantizar un buen ritmo de marcha en este SUV. Aceleraciones y recuperaciones entran dentro de lo correcto para su nivel de potencia, a pesar de sus largos desarrollos de cambio, especialmente en 6ª —de 58,6 km/h—, marcha en la que el reprís se hace esperar, de forma que según las exigencias deberemos jugar más o menos con las marchas.

PRESTACIONES Opel Crossland X 1.6 Turbo D
Acel. 0-100 km/h 10,44 s
Acel. 0-1000 metros 32,39 s
Adelantamiento 80-120 km/h 8,68 s
Sonoridad 100 km/h 65,6 dB
Sonoridad 120 km/h 69,4 dB
Frenada desde 120 km/h 54,71 m
Peso en báscula 1.343 kg

Ya a nivel de consumos, los 5 l/100 km de media real que hemos constatado a este SUV le colocan entre los mejores. Si, por ejemplo, miramos los datos del Peugeot 2008 con el mismo Diesel de 120 CV, que es casi una referencia en este apartado, vemos cómo le saca algunas décimas de ventaja, pero su menor talla también marcó 50 kilos menos de peso en nuestra báscula.

CONSUMOS Opel Crossland X 1.6 Turbo D
Consumo en ciudad 5,1 l/100 km
Consumo en carretera 5,0 l/100 km
Consumo medio 5,0 l/100 km

Por lo demás, al maniobrar en ciudad, se nota la anchura del pilar C del Crossland X —clave en el diseño de su techo— que reduce la visibilidad periférica en el ángulo tres cuartos trasero. Y si superamos algún pequeño ralentizador a baja velocidad, sale igualmente a relucir el tarado algo firme de la suspensión de este nuevo Opel. En cambio, se contienen bien los movimientos de carrocería y su forma de filtrar resulta más eficaz en carretera, facilitando el control del Crossland X, que cumple en cuanto a comportamiento y seguridad en cualquier escenario, pero sin mostrar en trazados sinuosos la misma agilidad que un 2008, de chasis más reactivo y con una calidad de rodadura superior. Una dirección poco informativa, el voluminoso pomo del cambio y los largos recorridos que definen el movimiento de la palanca, indican que no se ha dado prioridad a las sensaciones al volante, más logradas en el Mokka X.

ESPACIO Opel Crossland X 1.6 Turbo D
Anchura delantera 136 cm
Anchura trasera 132 cm
Altura delantera 90-97 cm
Altura trasera 89 cm
Espacio para piernas 71 cm
Maletero 425 litros