L’Hospitalet de Llobregat ha sido la localidad elegida por Tesla para abrir su primer concesionario con taller permanente en España. Aquellos que quieran hacerse con alguno de sus vehículos eléctricos tendrán la posibilidad de acercarse a este concesionario situado a apenas 10 minutos en coche del aeropuerto del Prat, el más cercano a la ciudad de Barcelona.
De esta manera, aquellos que quieran conocer de cerca los Tesla Model S y Model X, de momento los únicos automóviles disponibles de la marca en el concesionario, tendrán la oportunidad en L´Hospitalet de Llobregat, en un edificio que también alberga un taller en el que pasar las revisiones pertinentes (Tesla recomienda una cada año) o arreglar cualquier desperfecto que hayamos podido ocasionar.
De momento, aquellos que quieran pasar la revisión de su Tesla tendrán que desplazarse hasta la localidad catalana. El cliente tendrá que valorar si le merece la pena el desplazamiento, pues en las revisiones se llevan a cabo actualizaciones del software (algunas se pueden realizar desde casa mediante control remoto) y siempre se sustituye el parabrisas, además de acciones más convencionales como comprobar la alineación de las ruedas.
El desembarco de la firma está siendo lento en nuestro país, pero Jorge Milburn, director de la compañía en España, ha asegurado que en los próximos meses estarán disponibles tiendas permanentes de Tesla en la calle Serrano de Madrid y en la calle Roselló de Barcelona, aunque éstas carecerán de taller.
Más suministro eléctrico
En la presentación del concesionario también se ha hecho referencia a las posibilidades que tienen los clientes a día de hoy de recargar sus Teslas en nuestro país. Por ello, la marca ha confirmado que a finales de este año se prevé doblar la cifra de estaciones con supercagadores que teníamos a comienzos de 2017 y pasar de 12 a 24 lugares donde poder cargar nuestro vehículo al 50 por ciento en apenas 15 minutos.
En cuanto a enchufes convencionales, Tesla tiene hasta 155 puntos de recarga en destino, como pueden ser hoteles, restaurantes o centros comerciales. Además, existe la posibilidad de implantar un cargador propio de la marca en nuestra casa, por 500 euros, para llenar la batería de nuestro coche en menos tiempo, ya que si optamos por un enchufe convencional necesitaremos de unas ocho horas para obtener de 100 a 150 kilómetros de autonomía.
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