Volkswagen Golf 1.8T GTI 180 CV 3p

Volkswagen estira el mito GTI con la inclusión de una nueva versión de 180 CV. Ésta mantiene las dosis de diversión y potencia de su hermano menor de 150 CV, aunque ofrece unas prestaciones más destacadas. La pena es que estéticamente, ni por fuera ni por dentro, se nota que estamos en un coche tan especial.

Volkswagen Golf 1.8T GTI 180 CV 3p
Volkswagen Golf 1.8T GTI 180 CV 3p

El Volkswagen Golf está al final de su vida comercial. En unos meses se presentará en el Salón de Frankfurt la nueva generación de uno de los compactos más elitistas y populares del Viejo Continente. A pesar de ello, las cabezas pensantes de la compañía alemana decidieron comenzar este 2003 dando un empujoncito más, si es que lo necesita, a su gama actual. De esta manera, aparte de un reposicionamiento de los acabados y la inclusión de un novedoso motor de inyección directa de gasolina, el Golf GTI estrenaba una nueva mecánica turboalimentada de 180 CV. Bueno, exactamente no era un nuevo motor, sino que se trataba de una evolución del conocido 1.8T, al que los ingenieros de la marca alemana habían conseguido estirar hasta los 180 CV.El nuevo motor de 180 CV del GTI 1.8T deriva de la versión de 150 CV que ya es conocida en la gama. El incremento de potencia, nada más y nada menos que de 30 CV, se obtiene por una nueva gestión electrónica (denominada Motronic ME7.5), un mayor soplado del turbo y por la optimización de los conductos de admisión. Éstos se han diseñado específicamente para que la mezcla penetre en los mismos en forma de “torbellino", con lo que la explosión se produce en menos tiempo y con una mayor homogeneidad, mejorándose la eficiencia termodinámica y las emisiones de los gases de escape.Hablar de un coche como el Golf es una de las cosas más difíciles para un periodista-probador. Es un coche que todo el mundo conoce y del que todo el mundo tiene una opinión formada. Si a este apellido le añadimos las siglas GTI, la combinación resulta aún más explosiva. Años atrás, el poseer un Golf GTI era sinónimo de ser un “pijo" o un “quemado", sobre todo para aquellos desafortunados que no tenían uno. Ahora, años y generaciones del Golf después, la “democracia" ha llegado al automóvil y las miradas de envidia se reparten en muchos modelos más.La situación mundial no era la mejor para la industria del automóvil. La crisis petrolera era profunda e incluso, en algunos países, se había prohibido la circulación de coches los domingos. En esta situación, y con un mercado concienciado en el ahorro de combustible, una velocidad máxima de 150 km/h podía considerarse una cifra límite. Nadie en sus cabales, y menos una marca generalista, podía pensar en fabricar un modelo de las características del GTI…

Pero se hizo. No fue planificado, sino que constituyó un acto casi de insubordinación. Un ingeniero de desarrollo de Volkswagen preparó un Golf potenciado, que comenzó a proporcionar excelentes resultados en las pruebas a las que se le sometía: magníficas prestaciones y extraordinario comportamiento igual a diversión asegurada.

Y así, la “desobediencia" de una persona dio lugar a un vehículo muy admirado entre el personal de Volkswagen. En 1975, finalmente, se autorizó el inicio del desarrollo del proyecto EA 195, con el visto bueno de la recientemente constituida Comisión Estratégica de Wolfsburg. Dieciocho años después del nacimiento del Golf GTI, todo fabricante generalista se atreve a lanzar versiones potenciadas de sus modelos más populares y así tenemos un Focus ST 170 en el caso de Ford, un Corolla T Sport en el caso de Toyota o un Stilo Abarth si nos referimos a la italiana Fiat. Y estamos citando las versiones cargadas de caballos que no se olvidan de servir perfectamente a sus ocupantes para el día a día. Si aumentamos las potencias, nos encontramos con versiones más deportivas, como el Alfa 147 GTA, el Focus RS o, en la misma Volkswagen, el Golf R32. Pero estamos desviándonos casi hacia el circuito, volvamos a la carretera.Es en ella donde veremos a este GTI de 180 CV. Pero no nos será fácil identificarlo. Casi nada en su exterior nos indica que estamos ante el tercer Golf más potente de la gama, tras el R32 (241 CV) y el 2.8 V6 de 204 CV. Los más entendidos, sin embargo, sí que se fijarán en las siglas GTI que tiene en el maletero con la “i" encendida por el rojo de la pasión. Sobre todo cuando sean adelantados… Sí, no hay que negarlo (y en esta época de polémica con el tema de la velocidad parece casi pecado mencionarlo), el compacto de Volkswagen corre, corre mucho y corre bien. Los cruceros cercanos a los 200 km/h no son un problema para el coche, quizás sí para el conductor, al que recomendamos que, si no es avezado o si no quiere rascarse el bolsillo ante una previsible multa, vaya algo más despacio. Aunque, hay que reconocerlo, este GTI invita a que pisemos el acelerador.