Mercedes E 300 de: precios y prueba de la nueva berlina híbrida con etiqueta CERO

El nuevo Mercedes E 300 de dispone de un motor diésel y otro eléctrico, una exclusiva combinación que le permite ser extraordinariamente eficiente no solo en ciudad, también en carretera.

Lorenzo Alcocer

Mercedes E 300 de: probamos la nueva versión híbrida enchufable de la berlina alemana
Mercedes E 300 de: probamos la nueva versión híbrida enchufable de la berlina alemana

El plan de electrificación que tiene Mercedes para los próximos años nos indica, de alguna manera, hacia dónde va la automoción… y parece que hay cabida (y necesidad) para muchas variedades mecánicas. Con la meta en 2022, prácticamente a la vuelta de la esquina, toda la gama de modelos Mercedes contará de una manera u otra con mecánicas alternativas a las diésel y gasolina tradicionales, desde los urbanitas Smart, hasta los grandes SUV, pasando por todas sus berlinas y derivados. Y no faltará la multifacética Clase V. En algunos casos, la electrificación vendrá por sistemas sencillos de hibridación suave, bajo la tecnología EQ Boost con red de 48 voltios y alternador reversible con funciones de “segundo motor" en momentos muy específicos, que en nuestro mercado ya está avalado por el distintivo ECO. En el otro extremo, bajo la submarca EQ, ofertará una variada gama de eléctricos puros. Y entre medias, Mercedes ofrecerá toda una nueva serie de híbridos enchufables con tecnología de tercera generación. En total, son más de 130 las versiones que tiene la marca alemana en cartera.

MERCEDES E 300 DE: UN POCO DE TÉCNICA

El nuevo Mercedes E 300 de seguramente sea uno de sus nuevos híbridos más exclusivos del mercado, aunque solo sea por el hecho de contar como propulsor principal con un motor diésel (también ofrece otra versión híbrida con motor principal de gasolina, el E 300 e). Apenas Audi, Mercedes, el Grupo PSA y Volvo han ofrecido híbridos diésel con cierta representación en el mercado y en la actualidad solo Mercedes ofrece esta tecnología en el E 300 de.

La diferencia más sustancial con el anterior Mercedes E Hybrid es que el nuevo E 300 de dispone de recarga exterior plug-in y, por añadidura, de autonomía puramente eléctrica. Homologa en ciclo NEDC 2.0 54 kilómetros (52 en la versión familiar Estate), lo que le sirve para obtener la etiqueta CERO de la DGT. El E 300 de combina el modernísimo y ya de por si eficiente bloque 2.0 diésel de 194 CV OM654 que equipan innumerables modelos Mercedes convencionales, como el mismo Mercedes E 220 d, con otro eléctrico de 90 kW (122 CV), que se adosa entre el motor térmico y la caja de cambios 9G Tronic. La potencia combinada es de 306 CV (700 Nm el par motor), el consumo medio, 1,7 l/100 km (y 18,7 kWh) y acelera de 0 a 100 km/h en 5,9 segundos (6,0 el Estate). En modo eléctrico puede superar los 130 km/h.

Mercedes E 300 de: probamos la nueva versión híbrida enchufable de la berlina alemana

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En la batería de iones de litio se ha modificado la composición química de las celdas y sin otra variación, dispone de una capacidad bruta de 13,5 kWh, frente a los 6,4 kWh de la generación anterior, ocupando el mismo espacio. La recarga completa de la batería puede llevar desde 1,5 horas utilizando un Wallbox, hasta 5 horas en el más sencillo enchufe doméstico de 220 voltios y 8 amperios con 3,7 kW de potencia. Por cierto, la batería tiene una garantía de 6 años o 100.000 kilómetros. Y Mercedes estima que durante la vida media del coche (10/12 años), el rendimiento de la batería se mantendrá en niveles de rendimiento óptimos. El maletero del 300 de berlina pierde 140 litros de capacidad (homologa 400) y el Estate 160 (homologa 480 litros). El peso también se eleva en los híbridos en torno a los 200 kilos.

Mercedes E 300 de: probamos la nueva versión híbrida enchufable de la berlina alemana

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MERCEDES E 300 DE: NOS PONEMOS EN MARCHA

Nuestra primera experiencia con el Mercedes E 300de ha sido por Madrid capital y alrededores. Con la batería cargada al 90 por ciento de su capacidad, el indicador de autonomía eléctrica nos indicaba 38 kilómetros. El Mercedes E 300 de mantiene los modos de conducción Economy, Comfort, Sport, Sport Plus e Individual que conocemos en los modelos convencionales de la marca, a los que añade otros 4 programas para gestionar el sistema híbrido: Hybrid (combinado automático de motores), E-Mode (propulsión eléctrica), E-Save (prevalece el motor Diesel para mantener la batería con carga y ser utilizada cuando lo necesitemos) y Charg (recarga la batería en marcha).

La conducción del E 300 de no difiere de cualquier otro Clase E. En modo eléctrico ya no nos impresiona que la conducción del E 300 de resulte enormemente gratificante, en su caso ya no solo por la rápida, potente y silenciosa respuesta del motor, también por la exquisita calidad de rodadura de base de la Clase E. En modo Hybrid, su conducción también resulta muy agradable. Lógicamente el motor Diesel se hace sentir y escuchar, pero su grado de refinamiento es muy alto. Tener la posibilidad de elegir el modo de propulsión te permite gestionar cuándo y dónde utilizar solo el motor eléctrico… y sentirte un privilegiado circulando por Madrid Central. En ciudad parece lo más razonable activar el programa E-Mode, pero con propulsión eléctrica el E 300 de también es capaz de desenvolverse en carretera con mucha solvencia y alcanzar una velocidad superior a 130 km/h.

Mercedes E 300 de: probamos la nueva versión híbrida enchufable de la berlina alemana

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MERCEDES E 300 DE: HÍBRIDO DE LARGAS DISTANCIAS

Normalmente la eficiencia de los híbridos se aprecia especialmente en ciudad, en los congestionados y lentos trayectos donde el motor eléctrico se basta para asumir por muchos y continuados momentos la propulsión del coche. En cambio, en los tradicionales grandes híbridos de gasolina, en carretera el apoyo eléctrico apenas alivia a un motor térmico que se convierte en el propulsor principal, cuestionando su eficiencia general. En el caso del Mercedes E 300 de, el motor Diesel ya de por sí resulta muy eficiente y apenas le apoye el eléctrico, los consumos en ruta se antojan soberbios.

El modo Hybrid combina y alterna el empuje de ambos motores de la mejor manera, también teniendo en cuenta el perfil de la carretera y la densidad del tráfico, entre otros parámetros. Por ejemplo, la retención eléctrica es mayor (y por tanto la recarga de la batería), si el radar detecta que tenemos un coche muy próximo delante. También el E 300 de nos indica con vibraciones de su acelerador háptico hasta dónde acelerar para que intervenga lo menos posible el motor Diesel o cuando levantar el pie al acercarnos a una rotonda, etc. En esta primera prueba, recorrimos finalmente 100 kilómetros exactos, 25 aproximadamente por el centro de Madrid (en E-Mode) y el resto en carretera (en modo Hybrid). Obtuvimos un consumo final de 3,2 l/100 km de gasóleo y 8,3 kWh/100 km de electricidad. A una velocidad media de 49 km/h (en carretera nos movimos en torno a los 100 km/h, al ritmo del resto tráfico), tardamos 2 horas y dos minutos, y durante 1 hora y 28 minutos fuimos capaces de rodar solo en eléctrico y recorrer 54 km.

El Mercedes E 300 de ya está a la venta. La berlina tiene un precio de 67.400 euros y la versión familiar Estate, de 70.100 euros. El E 220 d 194 CV berlina cuesta 54.800 euros y 65.300 el E 350 d 286 CV.

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