Lexus LS 600h

Las tradicionales marcas lujo alemanas como BMW, Audi o Mercedes tienen la tecnología suficiente como para sacar un híbrido a la venta pero, hasta ahora, ninguna lo ha hecho. Pionera en esta materia, Lexus ya tiene en el mercado un SUV y una berlina media, y ahora se vuelve a adelantar con su lujoso LS que, además, lo tiene todo. Alemanes ¡ponganse las pilas ya!

Lexus LS 600h
Lexus LS 600h

Si han tenido alguna vez la oportunidad de probar cualquier modelo híbrido de Lexus, o incluso el Prius de Toyota, habrán comprobado, gracias a la calidad de funcionamiento y la fiabilidad, el dominio que tienen en este grupo japonés sobre esta tecnología. Primero se atrevieron a comercializar el Prius, un coche que apunta a un público para el que la ecología es una razón de peso. Con él se ofrece un producto con alta economía de uso y limpio con el medio ambiente, pero, aunque todavía caro, con un cliente de aspiraciones más modestas. Sin embargo, en Lexus ha ido más lejos, puesto que están ofreciendo coches híbridos para conductores de alto poder adquisitivo, que además demandan prestaciones pero… ¿tiene sentido que alguien que se puede gastar el dinero en un potente Audi, BMW o Mercedes de gasolina, le importe la ecología? Pues sí. Se podría decir que estos afortunados conductores se gastan el dinero en lo que hay; quieren un buen coche y, hasta la llegada de estos modelos, sólo tenían la oportunidad de optar a enormes motores poco respetuosos con la naturaleza.Tras conducir el nuevo Lexus LS 600h se entiende perfectamente. Se trata de una lujosa berlina, que compagina un poderoso V8 de gasolina con un motor eléctrico, alimentado por una batería que el propio giro de las ruedas se encarga de recargar; consume y contamina menos que un motor de 8 cilindros rival y, sin embargo, ofrece un rendimiento a la altura de un enorme V12 ¿porqué si uno se puede gastar más de 100.000 euros en un coche, no puede hacerlo respetando lo más posible a la naturaleza? Tiene sentido. Pero el Lexus LS 600h va más lejos, puesto que no sólo se adelanta siendo el primer híbrido comercializado de su categoría, sino que cuenta con mucha tecnología en materia de seguridad y confort que, aunque ya disponen de ella, sus principales rivales no se han atrevido, o están a punto de hacerlo, sacar en sus coches.Si han tenido alguna vez la oportunidad de probar cualquier modelo híbrido de Lexus, o incluso el Prius de Toyota, habrán comprobado, gracias a la calidad de funcionamiento y la fiabilidad, el dominio que tienen en este grupo japonés sobre esta tecnología. Primero se atrevieron a comercializar el Prius, un coche que apunta a un público para el que la ecología es una razón de peso. Con él se ofrece un producto con alta economía de uso y limpio con el medio ambiente, pero, aunque todavía caro, con un cliente de aspiraciones más modestas. Sin embargo, en Lexus ha ido más lejos, puesto que están ofreciendo coches híbridos para conductores de alto poder adquisitivo, que además demandan prestaciones pero… ¿tiene sentido que alguien que se puede gastar el dinero en un potente Audi, BMW o Mercedes de gasolina, le importe la ecología? Pues sí. Se podría decir que estos afortunados conductores se gastan el dinero en lo que hay; quieren un buen coche y, hasta la llegada de estos modelos, sólo tenían la oportunidad de optar a enormes motores poco respetuosos con la naturaleza.Tras conducir el nuevo Lexus LS 600h se entiende perfectamente. Se trata de una lujosa berlina, que compagina un poderoso V8 de gasolina con un motor eléctrico, alimentado por una batería que el propio giro de las ruedas se encarga de recargar; consume y contamina menos que un motor de 8 cilindros rival y, sin embargo, ofrece un rendimiento a la altura de un enorme V12 ¿porqué si uno se puede gastar más de 100.000 euros en un coche, no puede hacerlo respetando lo más posible a la naturaleza? Tiene sentido. Pero el Lexus LS 600h va más lejos, puesto que no sólo se adelanta siendo el primer híbrido comercializado de su categoría, sino que cuenta con mucha tecnología en materia de seguridad y confort que, aunque ya disponen de ella, sus principales rivales no se han atrevido, o están a punto de hacerlo, sacar en sus coches.