Manda la tradición y, con la intención de no hacer daño a su hermano mayor el Cherokee, el Jeep Compass se renueva en su totalidad conservando dimensiones exteriores. Longitud (4,40 metros) y distancia entre ejes (2,64 metros) son idénticas a la anterior generación que nació en el 2007, aunque en esta ocasión, de la mano del Grupo FCA, hereda la plataforma del Fiat 500X, pero con una imagen que lo identifica claramente al gusto del tradicional cliente de Jeep, conservando una gran calandra.
Mecánicamente, la versión que hemos probado del nuevo Jeeop Compass está motorizada por un propulsor Diesel de 1.956 cm3 y 140 CV de potencia (en este enlace verás todos los datos y mediciones), asociado a una caja de cambios automática de convertidor de par de 9 velocidades y a la tracción total.
La respuesta del motor es correcta para los más de 1.700 kg que pesa este Compass, pero es cierto que se echa en falta mayor inmediatez al acelerar, algo a lo que no ayuda una excesivamente conservadora gestión del cambio automático, de suave funcionamiento pero lento ante los requerimientos del conductor. El sistema de tracción total está formado por un embrague multidisco capaz de repartir el par desde un 60/40 entre trenes hasta el 100% al eje trasero. Para ello permite seleccionar entre 4 modos de conducción (auto, snow, sand y mud) que ayuda a garantizar un óptimo avance sobre cualquier superficie.
El comportamiento del nuevo Jeep Compass se puede calificar de notable, claramente mejor en este aspecto que la anterior generación, pero sin llegar al perfecto equilibrio de un Seat Ateca. El ajuste de suspensión digiere de forma eficaz cualquier irregularidad del pavimento, pero no es capaz de absorber completamente reductores de velocidad y paso de peatones elevados.
El consumo real del Jeep Compass
Peso, cilindrada y configuración mecánica de esta versión del Jeep Compass no auguran un reducido consumo de combustible y, efectivamente, este modelo se sitúa con un consumo medio real de 6,7 l/100 km (dividido porcentualmente entre los 6,2 que nos ha gastado en nuestros recorridos en carretera y los 7,4 en los test urbanos), superior a la media del segmento.
Por ejemplo, un Seat Ateca 2.0 TDI 190 CV 4Drive (mucho más potente) se conforma con 6,2 l/100 km de media, y prestacionalmente además es obviamente muy superior. Está claro que el consumo de este Compass no es reducido, pero es cierto que su potencial cliente valora más otros muchos aspectos como la exclusividad que aporta Jeep… y sus condiciones como verdadero todoterreno.
