Si buscas algún coche que ande lo que lo hace y cómo lo hace el pequeño SUV Hyundai Kona, podrías fijarte en utilitarios del estilo del Peugeot 208 GTI o Mini Cooper S, por citar dos ejemplos clarificadores. Hay pocos modelos semejantes al Kona —Jeep Renegade, Nissan Juke o Fiat 500X—, pero sí que tienen versiones de características técnicas y precio parecidos.
La razón arranca en el motor que incorpora este Hyundai Kona tan especial: bajo su capó lleva un gasolina 1.6 T-GDI de 177 CV, que se muestra pletórico en su empuje ya desde un régimen de giro relativamente bajo —a 1.700 vueltas se siente muy enérgico— y que se mantiene así hasta las 5.500 rpm, aunque si en ese momento no cambiamos de marcha, su caja de doble embrague 7DCT lo hará por nosotros sólo un poco más tarde, a las 6.000. La sensación con este SUV es que prácticamente salta hacia adelante cuando se acelera a fondo, ya sea desde parado o en marcha.
Sin embargo, en los dos casos, el cambio relativiza tan poderoso despliegue de energía: en la primera situación se toma su tiempo en cerrar los embragues y, en la segunda, en llevar a cabo la reducción a la marcha más corta que el giro del motor tolerará. En el Kona, la elección manual de la marcha —tiene “kick-down” en esa posición— sólo se puede hacer con la palanca: carece de las levas de otros modelos con esta misma caja.
PRESTACIONES | Hyundai Kona 1.6 T-GDi Style DCT 4X4 |
Acel. 0-100 km/h | 6,92 s |
Acel. 0-1000 m | 28,06 s |
Sonoridad 120 km/h | 72 dBA |
Sonoridad 140 km/h | 74 dBA |
Frenada desde 140 km/h | 74 m |
Peso en báscula | 1.482 kg |
Hyundai Kona 1.6 T-GDi: gran chasis
El chasis está en línea con el poderío de su motor, empezando por una tracción total que reduce el riesgo de pérdida de motricidad. Tiene una dirección precisa y con buen tacto, a la que lo único que le falta es requerir menos espacio para maniobrar, pues hasta se puede configurar el grado de asistencia en dos niveles —también la relación entre motor y acelerador o cómo funciona el cambio— con la tecla Drive Mode: de Comfort a Eco no apreciamos la diferencia que pudiera haber entre estos modos y el Sport. Además, la suspensión tiene un ajuste sólido, firme en compresión.
CONSUMOS | Hyundai Kona 1.6 T-GDi Style DCT 4X4 |
Consumo en ciudad | 7,6 l/100 km |
Consumo en carretera | 6,7 l/100 km |
Consumo medio | 7,1 l/100 km |
Hyundai Kona: así es su interior
En el interior del Hyundai Kona puedes encontrar varios detalles llamativos. Uno de ellos es el sistema HUD (Head Up Display), que proyecta en el parabrisas datos de las ayudas activas a la conducción y de la velocidad de marcha. Este sistema se suma a la pantalla del ordenador de a bordo y a la pantalla táctil del sistema de navegación, conectividad y sonido. Otro de sus “gadgets” destacados, el sistema de carga inalámbrica para dispositivos móviles.
Entre el equipo distintivo de esta versión están el cuero o, en los asientos delanteros, los reglajes eléctricos. No nos podemos olvidar de la batería de ayudas a la conducción: aviso activo de cambio de carril, de vehículos en el ángulo muerto, frenada automática de emergencia, etc.
ESPACIO | Hyundai Kona 1.6 T-GDi Style DCT 4X4 |
Anchura delantera | 138 cm |
Anchura trasera | 131 cm |
Altura delantera | 94/100 cm |
Altura trasera | 131 cm |
Espacio para piernas | 66 cm |
Maletero | 290 litros |
Hyundai Kona, en conclusión
Las prestaciones del Hyundai Kona 1.6 T-GDi están al nivel de un, nada sospechoso de lento, Mini Cooper S, por ejemplo. Y, además, gasta de forma bastante razonable. Dinámicamente ágil, también por chasis. Es un GTI vestido de SUV.
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