Hyundai i30 1.6 TGDi Turbo contra Nissan Pulsar 1.6 DIG-T, ¿verdaderos GTI?

Son los Hyundai i30 y Nissan Pulsar tope de gama. Versiones turbo que se acercan a los 200 CV en gasolina y tienen, además, puesta a punto específica. ¿Son deportivos ya de raza?

Jordi Moral. Twitter: @jordimoralp Fotos: Israel Gardyn.

Hyundai i30 1.6 TGDi Turbo contra Nissan Pulsar 1.6 DIG-T, ¿verdaderos GTI?
Hyundai i30 1.6 TGDi Turbo contra Nissan Pulsar 1.6 DIG-T, ¿verdaderos GTI?

No podemos decir, desde luego, que estos nuevos Hyundai i30 1.6 TGDi Turbo y Nissan Pulsar 1.6 DIG-T no sean coches honestos. Ni mucho menos. De estreno, los dos llegan hoy como versiones más altas de sus respectivas gamas, exhibiendo la máxima potencia y equipamiento, pero sin asociarse en ninguno de los dos casos a siglas deportivas específicas. Bien hecho.

Pero también es verdad que cuando uno escucha la palabra compacto, oye hablar ya prácticamente de 200 CV (el Nissan Pulsar incluso los supera en nuestro banco de rodillos, cifrando hasta 202 CV) y lee la palabra “Turbo” (como la que recordarás también en míticos portones como los del Ford Escort RS, Renault 11 o Lancia Delta HF), inmediatamente te vienen muchas imágenes y sensaciones a la cabeza… que, aquí, no tendrán hoy idéntica continuidad. Y es que, más que a radicalidad y a extra de potencia, ese término se asocia ahora a nuevos motores de baja cilindrada para tratar de correr gastando lo mínimo posible. Así que así también deberás entenderlo ya hoy para no sumirte en la decepción que puede suponer, en primer lugar, ponerte a los mandos del nuevo compacto “top” de Nissan.

De hecho, la dinámica nunca fue, ni mucho menos, una prioridad en el desarrollo del Pulsar, como de inicio directamente lo hacen ver ya sus proporciones. Nacido para ofrecer el mayor volumen de espacio y maletero de la categoría, es hasta 7 centímetros más alto que el compacto medio, tiene unas vías relativamente estrechas y un poco equilibrado reparto de pesos (64/36% entre los trenes delantero y trasero, respectivamente) que no son ya una apuesta a la agilidad. Estéticamente también discreto, sí busca en cambio esta vez una mayor emoción de chasis a través de un nuevo tarado de la amortiguación trasera, muelles delanteros específicos, ajustes de ESP, una dirección revisada y hasta frenos y neumáticos sobredimensionados. “Sensaciones más deportivas”, prometía Nissan… que, sin embargo, no aparecen.

 

Sin Pulsar… ciones

Hyundai i30 1.6 TGDi Turbo contra Nissan Pulsar 1.6 DIG-T, ¿verdaderos GTI?

Y eso que este Nissan Pulsar 1.6 DIG-T, al menos, es bastante ligero. Aunque algo más firme que otros Pulsar en la pisada, resulta muy suave de mandos (dirección, pedales, acelerador…), agradable en la rodadura y noble de reacciones, pero muy poco estimulante. Ni la dirección transmite en exceso, ni el chasis está a la altura de una versión medianamente deportiva: abre pronto la trazada si entras en curva con demasiada alegría, pierde rueda fácilmente si buscas salir rápido acelerando en apoyo y, como consecuencia, sus controles electrónicos resultan muy intrusivos y conservadores para que nunca se desestabilice. Está claro que invita a levantar el pie: la satisfacción la encontrarás por otros caminos.

No así en el Hyundai i30 1.6 TGDi Turbo. Si, estéticamente, la marca coreana mete más salsa a su compacto con nuevos paragolpes y difusor, contrastes en rojo o doble salida ya de escape, arrancar te lleva también más a un producto de vieja escuela. Presumen en la marca de haber desarrollado esta versión Turbo en Nürburgring, afinando allí nuevos tarados de suspensión, una dirección más directa, relaciones más cortas de cambio y hasta una carrocería rebajada 5 milímetros ante el resto de i30. No hace aquí falta que nos lo cuenten.

 

Deportividad en i30

Sentados ya claramente más bajos en el Hyundai i30, no es tampoco ante un compacto radical, pero transmite mucho más “feeling”. Tiene un tacto más duro y rodando es más “rebotón”, por lo que al sentirlo siempre más retenido parece pedir ya de inicio más guerra. Y la tienes. Apenas balancea, tracciona mucho mejor, es más vivo de reacciones gracias a un ESP que deja más libertad de movimientos, su capacidad de frenada es excepcional y su dirección es muy precisa e informativa. Más divertido y ágil, sí te lo crees por sensaciones como puro GTI… hasta que te vienes arriba y pisas ya acelerador a fondo.

                           

De aquellos Turbo…

A éstos. Y es que al Hyundai i30 parece luego faltarle una puntita más de velocidad para elevarlo, como versión más potente de su gama, a la categoría ya de GTI real. No tanto en este sentido, en cambio, al Pulsar. Hay coches donde la potencia te hace vibrar. Y otros, como en este Nissan, donde deberás entenderla como simple reserva de aceleración, velocidad pura. Sin más. Y es ahí donde este Pulsar 1.6 DIG-T aprovecha su mejor relación peso/potencia (casi 60 kg menos que el i30 y hasta 20 CV más en la práctica) para ser más rápido en prestaciones que el Hyundai.

No es que sea una verdadera bala este Nissan Pulsar, pero bajar ya claramente de los 8 segundos en el 0-100, y rondar los 28 en los 1.000 metros, empiezan a ser cifras más que considerables… aunque aún alejadas, no ya de la entrada a un mundo GTI donde el VW Golf le rebaja más de 2 segundos, sino incluso de un Seat León 1.8 TSI FR de “sólo” 180 CV o un Kia Pro_cee'd de 204 CV que, aun en su mismo escalón inferior al GTI, le meten también más de 1 segundo en aceleración. Veloces sí, pero rapidísimos no son, por tanto, ni un Hyundai i30 que parece emplear su último 10% de recorrido de pedal casi a modo de interruptor de potencia (parece ofrecer un kick-down), ni un más potente Nissan Pulsar que sólo parece mostrar agresividad en su sistema Stop/Start: tarda en parar, mete revoluciones y cae muy brusco.

Ambos, Hyundai i30 1.6 TGDi Turbo y Nissan Pulsar 1.6 DIG-T, coinciden eso sí en propuesta (motores 1.6 turbo de inyección directa) y respuesta, donde prima la suavidad, la progresividad y el agrado siempre subiendo de vueltas. Olvida por tanto el carácter puntiagudo, los retrasos de un luego muy explosivo turbo o los consumos de más de 10 l/100 km de aquellas primeras versiones Turbo: ambos muy dosificables y con buen bajo régimen, marcan a cambio los mejores gastos hoy de su clase, con un Nissan Pulsar aquí asombroso al registrarnos 6,6 l/100 km de media… casi los mismos que su versión 1.2 DIG-T de 115 CV o que el alabado Peugeot 308 1.2 PureTech de 3 cilindros y 130 CV.

Por ahí, por tanto, es donde empezarás ya a encontrar el brillo de un Nissan Pulsar 1.6 DIG-T rápido, discreto, cómodo y sin rival como compacto familiar: si el Hyundai 30 ya muestra buena habitabilidad, Nissan es capaz de ofrecer la altura y el espacio para piernas de un VW Passat, con un maletero superior a VW Golf o Peugeot 308 y sólo superado en la categoría por Honda Civic. Si en su momento siempre debatimos sobre el buen producto que sería por agrado, espacio y manejo un Nissan Leaf con motor térmico, hoy lo tenemos aquí en este Pulsar. Siempre y cuando lo entendamos como compacto familiar potente. Así de simple, sin más.