Hablar actualmente de deportividad extrema en carretera puede parecer algo irracional, y lo es, pero la realidad es que vehículos como este DS 3 Performance no se conciben sin un componente puramente pasional que lo respalde. Toda característica mecánica se encuentra enfocada a mejorar la efectividad en curva, dejando poco margen para otros detalles enfocados a sublimar el confort.
La nueva actualización del DS 3 Performance sigue propulsada por el conocido motor turbo de cuatro cilindros en línea, con 1,6 litros de cubicaje y una potencia de 208 CV (aunque en realidad no alcance dicho valor, salvo en condiciones de laboratorio). No es un detalle importante, ya que la buena elección de sus desarrollos finales hace que siempre tengamos empuje de sobra, independientemente de la marcha seleccionada.
El nuevo reglaje de suspensión del DS 3 Performance está orientado a facilitar la conducción deportiva sobre firmes irregulares —también reduce la anchura de neumáticos—, pues éste era uno de los pocos puntos a mejorar y ahora este DS 3 Performance ofrece una mejor pisada sobre carreteras en mal estado, limitando el «copiado» del asfalto. A la hora de frenar, no asombra tanto por distancia como por resistencia ante un uso intensivo, momento en el que sale a la luz la buena calidad de sus frenos Brembo, con pinzas de 4 pistones.
DS 3 Performance, así es su interior
El DS 3 Performance no es la referencia si pensamos en ergonomía interior, pero en cuanto a calidad visual de los materiales empleados y de su diseño cumple con nota, con un buen ajuste de todos los elementos que no provoca ningún tipo de ruido a pesar de la rigidez del conjunto y de la firmeza de suspensión. Su habitabilidad es algo justa para realizar viajes en las plazas traseras y el maletero, de 270 litros de capacidad, no permite grandes alardes. Lo mejor de su interior se encuentra en el puesto de conducción y en las sensaciones que trasmite al volante; todo muy racing, desde el diseño de sus asientos, hasta el metálico y preciso tacto en cada cambio de marchas.
La conectividad también toma protagonismo en el habitáculo del DS 3 Performance. Con la adopción del sistema Mirror Screen, se permite el control de algunas de las aplicaciones instaladas en ciertos smartphones del mercado, puesto que no es compatible con varios modelos existentes.
DS 3 Performance, en conclusión
El DS 3 Performance siempre ha destacado por el buen hacer de su bastidor, pero en esta última hornada se encuentra por encima de la mayoría de sus rivales. El diferencial Torsen, junto a una buena puesta a punto de bastidor y controles electrónicos, hacen que el paso por curva sea rapidísimo con poco que sepas lo que tienes entre manos. No es un coche cómodo, pero el que se decanta por este DS 3 sabe muy bien lo que quiere, y está claro que no es precisamente confort.
En definitiva, el DS 3 Performance es perfecto para los amantes de la conducción deportiva y poco recomendable para quien solo busque diferenciación estética, en cuyo caso bastaría con añadir el paquete Performance Line a otros acabados inferiores con menos motorización.
DS 3 Performance 1.6 THP. Datos técnicos
| Medición | DS 3 Performance 1.6 THP |
| Motor (*) | 1.598 cm3/4 cilindros en línea |
| Potencia (*) | 208 CV a 6.000 rpm |
| Par máximo (*) | 30,6 mkg a 3.000 rpm |
| 0-100 km/h | 6,4 s |
| Consumo urbano real | 7,5 l/100 km |
| Consumo carretera real | 6,0 l/100 km |
| Consumo medio real | 6,8 l/100 km |
| Frenada 120-0 km/h | 54 m |
| Peso | 1.206 kg |
| Maletero | 270 litros |
| Espacio piernas trasero | 61 cm |
| Anchura delantera/trasera | 136/140 cm |
| Altura min/máx | 93-99/100 cm |
| Precio | 27.590 euros |
(*) Datos oficiales, el resto, medidos por el Centro Técnico de Autopista.
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