Duelo SUV: Honda HR-V vs Skoda Yeti, más que urbanos

El Honda HR-V y el Skoda Yeti son los SUV urbanos con los habitáculos más espaciosos de la categoría. Suma dinamismo el HR-V 1.6 i-DTEC y versatilidad el Yeti 2.0 TDI 4x4.

Lorenzo Alcocer

Duelo SUV: Honda HR-V vs Skoda Yeti, más que urbanos
Duelo SUV: Honda HR-V vs Skoda Yeti, más que urbanos

Honda ha sido el último fabricante en ofrecer un SUV en la categoría de modelos urbanos. Y lo hace con un HR-V que pasa por ser un SUV de puertas hacia dentro enormemente funcional. La referencia hasta ahora era el singular Skoda Yeti, un SUV por formas y proporciones atípico, con un habitáculo sorprendente por espacio y soluciones, propio de un monovolumen que incide en la funcionalidad y versatilidad. Con una longitud de 4,2 metros, el veterano Skoda Yeti ofrece una habitabilidad y capacidad de carga similares a coches mucho más grandes. Pero ahora el nuevo Honda HR-V va incluso un poco más lejos en este sentido.

Si te dejas llevar por las insinuaciones de sus carrocerías, creerías que el Yeti es el rey del espacio. Pero sin dejar de serlo, el nuevo Honda HR-V (mide 4,3 metros de largo) es tanto o más espacioso. No obstante, aunque las cotas internas son sobresalientes para el tamaño de ambos coches, las sensaciones son muy diferentes. El Skoda Yeti te puede transmitir más espacio vital por su gran cota de altura interior y sobre todo por su luminosidad, fruto de una superficie de cristal inmensa por todo el perímetro de la carrocería. Por comparación, la silueta "couperizada" del HR-V puede visualmente restar espacio, pero en general resulta amplísimo y comodísimo.

Skoda Yeti Outdoor 4x4

Honda HR-V y Skoda Yeti: cajas mágicas

Las filas traseras de ambos coches ofrecen ingeniosas soluciones. Quizá la más práctica sea la posibilidad de regular longitudinalmente la banqueta del Skoda Yeti. Atrasada del todo ofrece muchísimo espacio para las piernas, aunque no tanto como el excepcional Honda HR-V. Y adelantándola, el Yeti nos ofrece un increíble maletero verificado por nosotros de 585 litros... ¡casi como un Skoda Superb! Lo sorprendente es que también disponemos de ese volumen de carga en el HR-V, aunque en su caso sumando a los 470 litros fijos de su maletero, otros 105 que cunden mucho (dan para dos maletas de mano y algo más) que esconde en el falso piso del propio maletero.

Las soluciones por aprovechar el espacio ahí donde hay los convierten casi en mecanos. El Honda HR-V de un solo gesto reclina el respaldo posterior por mitades y lo enrasa con la superficie del maletero, dejando un espacio muy grande y diáfano. Además, su ingeniosa banqueta trasera, también partida, se puede abatir en vertical para aprovechar el suelo del habitáculo para llevar más carga. Con la banqueta en su sitio también se puede depositar objetos debajo.

El Skoda Yeti es más físico manipulando sus asientos traseros (son tres butacas independientes), que pueden ser abatidos y también extraídos, liberando un volumen de carga propio de una furgoneta. Incluso el respaldo del asiento del copiloto se puede reclinar hacia delante, permitiendo transportar en el Yeti objetos muy largos.

Honda HR-V

Honda HR-V y Skoda Yeti: dos ambientes

El espacio puede ser más o menos el mismo, pero el ambiente que respirarás como conductor son muy diferentes. Aun con un punto de caderas elevado, en el Honda HR-V te sientes muy integrado en la tarea de conducir. Rezuma cierta deportividad su puesto de conducción, donde destaca la elevada posición de su corta palanca de cambios que, por cierto, tiene un tacto y guiados exquisitos. Por comparación, en el Skoda Yeti te sientes como en un monovolumen, pero en el que también te posicionas perfecta y cómodamente frente al volante. No tiene la personalidad del HR-V, pero en el Yeti todo está en su sitio y transmite mucha calidad y solidez.

La "chispa" del Honda HR-V también la sientes cuando te pones a rodar con él. Su bastidor se siente más ligero y reactivo y su amortiguación te transmite un tacto de pisada y de guiado con más puesta a punto deportiva que el equilibradísimo Skoda Yeti. Al HR-V lo sientes consistente, ágil, preciso y agradable conduciéndolo rápido, y siempre cómodo, pero dejándote llevar por lo bien que anda esta versión 1.6 i-DTEC 120 CV y su gran tacto mecánico, esperas más oficio de un tren delantero que no disimula el suvbiraje en carretera virada.

Donde no puede llegar el Honda HR-V es a la versatilidad dinámica que también cuida el Skoda Yeti doblando su oferta con variantes 4x4, como la unidad aquí probada. El Yeti tiene un rodar y una puesta a punto de bastidor muy equilibrado. Nada te lleva a definir su conducta como deportiva o específica, y sí como la de un coche equilibrado y pragmático en toda situación. Su condición 4x4 hace del Skoda Yeti un coche completísimo, un verdadero SUV, polivalente por carrocería y por dinámica. Está claro que si necesitas un plus de tracción porque ruedas por nieve, tierra u buscas una mayor seguridad en agua, el Skoda Yeti te ofrece una versatilidad de uso a la que no llega el Honda HR-V.

Honda HR-V y Skoda Yeti: 1.6 iDTEC & 2.0 TDI

En ti queda la decisión de invertir no pocos euros más por una tracción que también tiene otro tipo de lectura en esta versión del Yeti. Kilos, coeficiente aerodinámico y rozamientos mecánicos lo lastran y la respuesta de su motor 2.0 TDI 110 CV por momentos se siente justa. Enfrente, un Honda HR-V con un ligero bloque Diesel de aluminio de 1.6 litros más potente (120 CV) y de respuesta siempre más poderosa. No vale descuidarse en un Skoda Yeti que siempre pide una mínima presión sobre el acelerador para no sentir que se frena al desacelerar y que exige acertar con la marcha de cambio adecuada.

Por su parte, a aquellas connotaciones deportivas de chasis y de diseño del HR-V le corresponde un motor contundente y rápido desde abajo, y tan capaz como para aguantar su 6ª marcha (también tiene seis velocidades el Yeti) con solo 1.000 rpm. Por respuesta el Honda HR-V es un coche mucho más rápido y agradable de conducir, pero además también más ahorrativo de combustible. Sus ajustados consumos marcan mucha diferencia con un Skoda Yeti que tanto en ciudad como en carretera debe pagar las ventajas de su tracción integral tipo Haldex de esta versión, y también las desventajas de la mala resistencia aerodinámica del modelo.

Honda HR-V 1.6 i-DTEC & Skoda Yeti Outdoor 2.0 TDI 4x4 

Honda HR-V 1.6 i-DTEC & Skoda Yeti Outdoor 2.0 TDI 4x4: la comparativa en números

 

Honda HR-V 1.6 i-DTEC

Precio final: 28.050 €

Aceleración 0-100 km/h: 9,76 s

Aceleración 1000 metros: 31,6 s

Recuperación 20-50 km/h en 2ª: 3,2 s

Recuperación 80-120 km/h en 4ª: 8,1 s

Recuperación 80-120 km/h en 6ª: 12,5 s

Consumo urbano: 5,5 l/100 km

Consumo carretera: 5,0 l/100 km

Frenada 140-0 m: 76,2 m

Maletero: 470 105 dm3

Espacio piernas trasero: 80 cm

 

Skoda Yeti Outdoor 2.0 TDI 4x4

Precio final: 29.990 €

Aceleración 0-100 km/h: 11,47 s

Aceleración 1000 metros: 33,6 s

Recuperación 20-50 km/h en 2ª: 3,0 s

Recuperación 80-120 km/h en 4ª: 10,5 s

Recuperación 80-120 km/h en 6ª: 19,4 s

Consumo urbano: 7,0 l/100 km

Consumo carretera: 6,5 l/100 km

Frenada 140-0 m: 70,2 m

Maletero: 485/585 dm3

Espacio piernas trasero: 61/76 cm

 

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