Ya está aquí el coche eléctrico. En realidad estaba hace tiempo, pero cada día que pasa se va haciendo más real. De los primeros prototipos hemos llegado hasta los dos modelos que nos acompañan, el Nissan Leaf y el VW e-Golf, que quieren y hasta podrían ser considerados como coches normales. Han aumentado su autonomía, sus prestaciones y su oferta, aportando la ecología de uso por bandera. No contaminar y hacerlo con un funcionamiento silencioso tiene su satisfacción tanto a nivel personal como global. Por eso son coches muy agradables, hasta tal punto que llegan a enganchar a quien sepa valorarlos, cumplan con sus necesidades y, sobre todo, a quien acepte sus limitaciones.
Los coches eléctricos no son para todo el mundo. Requieren programación, gestión de la energía y olvídate de viajar. Piensa en ellos como en un teléfono móvil. Sales de casa con la batería a tope y enchufas allá donde vas, si es que lo necesitas. Otra cosa es que en tu destino haya punto de carga, que digan lo que digan los “verdes" ayuntamientos, todavía está por mejorar, mejor dicho, por empezar; hay ya más oferta de coches que de “electrolineras".
Por la autonomía real que puedes conseguir con un Nissan Leaf o un VW e-Golf ya puedes utilizarlos fuera de las grandes ciudades, su lugar favorito, pero todavía no se pueden alejar de un enchufe más de 250-300 km, ni tampoco lo pretenden. Tener estos coches sin un lugar propio (o en el trabajo) para cargar es inviable. Si aparcas en la calle, lo tendrás complicado; asignatura pendiente en nuestro país. No hace falta cargar todos los días ni tampoco hacerlo al cien por cien, al 80 por ciento tardan poco en llegar (es variable, de 16 horas a 40 minutos, según dónde los enchufes) y hay poco más de 200 km de autonomía. Todo depende de ti y tus necesidades. Si haces unos 200 km diarios, da igual por dónde siempre que cuides la velocidad, ya te puedes plantear un coche eléctrico y aquí cualquiera de los dos será un buen medio de transporte. Veamos cuál te encaja más.
PRESTACIONES | Nissan Leaf 40 kWh Tekna Propilot Park | Volkswagen e-Golf |
Potencia | 110 kW (150 CV) | 100 Kw (136 CV) |
Capacidad batería | 40 kWh | 35,8 kWh |
Acel. 0-100 km/h | 8,15 s | 8,73 s |
Acel. 0-1000 metros | 30,6 s | 30,93 s |
Sonoridad 100 km/h | 64,8 dBA | 66,1 dBA |
Sonoridad 120 km/h | 68,3 dBA | 69,4 dBA |
Frenada desde 140 km/h | 80,73 m | 73,51 m |
Peso en báscula | 1.588 kg | 1.570 kg |
Nissan Leaf y VW e-Golf: detalles técnicos
Ambos son compactos eléctricos y al final tienen un resultado en cuanto a prestaciones, autonomía y espacio muy parecido, al que cada uno llega por su propio camino. El Leaf apuesta por un motor más potente y batería con más capacidad, 150 CV y 40 kW/h frente a los 136 CV y 35,8 kW/h del Golf. También es diferente la forma de gestionar la energía. El Nissan tiene dos modos de conducción. Uno se podría considerar como normal, en el que aceleras y frenas como en un coche convencional. Cuando dejas de acelerar retiene, es decir, recarga, ligeramente. El otro se denomina e-Pedal y, salvo emergencia, no es necesario usar los frenos del coche. Basta con calcular la distancia a la que queremos parar y levantar el pie del acelerador, que el coche aprovechará para aplicar freno motor recargando a la vez las baterías con más énfasis hasta la detención total del vehículo. Es más fácil de lo que suena y enseguida te haces a ella. Esta solución la estrenó el BMW i3 y es muy inteligente, práctica y recomendable para ciudad.
CONSUMOS | Nissan Leaf 40 kWh Tekna Propilot Park | Volkswagen e-Golf |
Consumo medio | 14,7 kW/100 km | 12,8 kW/100 km |
Autonomía media | 272,1 km | 279,7 km |
Por su parte el VW e-Golf ofrece la misma función “normal" de su rival y añade la posibilidad de que sea el conductor el que decida el nivel de recarga en movimiento, y por tanto de freno motor, moviendo la palanca de cambios en cuatro posiciones. Cada sistema tiene sus ventajas e inconvenientes. Por ejemplo el Nissan resulta más eficiente en ciudad pero carece de un modo de conducción a vela de su rival; lo tiene, pero hay que buscarlo con el acelerador y mirando a la pantalla, que no es fácil. En el Golf puedes gestionar mejor la recarga en movimiento, pudiendo llegar a ser más eficiente si dominas la técnica, pero claro, implica que haya que estar jugando con el selector del cambio si quieres llegar a esa eficiencia. Si te gusta conducir y participar de la conducción, preferirás al alemán, si quieres que te lo den todo hecho, el japonés lo disfrutarás más. En resumen, el Leaf debería tener conducción a vela para cuando sale de la ciudad y el Golf un e-Pedal para cuando entra en ella.
Nissan Leaf y VW e-Golf: comportamiento
El comportamiento dinámico es bueno en los dos casos. Me permití el lujo de meterlos en circuito para ver el límite de sus bastidores y me llevé una grata sorpresa. Eso sí, no me gustaron nada los neumáticos de baja resistencia, están bien para ir despacito pero en cuanto les exiges empiezan a “chillar" y no agarran lo suficiente. Si el coche fuese mío, en el primer cambio de ruedas les pondría una goma normal, que el día en el que tienes que esquivar a otro coche, frenar de emergencia o tomar una curva “inesperada" lo agradeces. El Golf siempre va más asentado, mientras que el Leaf pierde rueda por tracción a la mínima. No es crítico pero su rival lo hace mejor. Curiosamente el Nissan se maneja mejor en modo ECO, ya que quita par al motor y evitas las pérdidas de motricidad. Ya en un entorno normal, para el que han nacido, resultan cómodos y no tienen nada que envidiar a ningún compacto del mercado. El Golf siempre se siente como un Golf, como si llevase un motor Diesel o gasolina, pero con su silencio y agrado de marcha. El Nissan en cambio se siente como un coche eléctrico. Tiene tacto diferente. Esto no es malo, también tiene su encanto.
ESPACIO | Nissan Leaf 40 kWh Tekna Propilot Park | Volkswagen e-Golf |
Anchura delantera | 138 cm | 142 cm |
Anchura trasera | 132 cm | 135 cm |
Altura delantera | 99/102 cm | 91/98 cm |
Altura trasera | 90 cm | 96 cm |
Espacio para piernas | 69 cm | 75 cm |
Maletero | 480 litros | 380 litros |
Sinceramente, por comportamiento, aunque sea mejor el Golf, yo no basaría mi decisión de compra en estos coches. Es difícil medir consumos en un eléctrico en situación real y fuera de un banco, puesto que cada vez hacen uno diferente, pero promediando con el Volkswagen siempre hemos llegado un poco más lejos.
En la vida a bordo se repiten las sensaciones del comportamiento, pero aquí la culpa la tiene la postura de conducción, impecable en el VW, extraña en el japonés, que no tiene reglaje de profundidad de volante y en el asiento vas sentado con forma de cuatro, postura ideal para los atascos ciudadanos, por cierto. En el Nissan hay más gráficos sobre la eficiencia de conducción, mientras que el alemán podrías llegar a esconder que es un eléctrico a tus amistades menos expertas. Como compra maestra es mejor el Nissan, ya que su versión más equipada tiene de todo y está al mismo precio que el e-Golf. Puedes comprarlo con menos equipamiento y más barato si quieres, el Golf no; depende de lo qué valores. En cualquier caso te aconsejo comprarlos por renting, así te aseguras no tener un coche obsoleto dentro de tres años, ya que los eléctricos se actualizan casi a la velocidad de los teléfonos móviles.