No llegará al mercado español hasta mayo de 2019 y el VW T-Cross, el nuevo SUV pequeño de la marca germana, está causando una gran expectación. Ahora, este nuevo modelo vuelve a copar el protagonismo con la más que probable versión T-Cross GTI.
En informaciones pasadas, ya te explicamos que la estructura técnica del VW T-Cross iba a ser la MQB-A0 del Grupo Volkswagen, es decir, la plataforma modular transversal para coches y SUV pequeños del consorcio alemán. De esta forma, el nuevo T-Cross va a compartir genes técnicos y motores con otros modelos del grupo, como el Seat Ibiza, el Seat Arona y el VW Polo.
A nivel mecánico, la gama del VW T-Cross quedará formada inicialmente por cuatro motores, todos ellos ya adaptados convenientemente a la norma anticontaminante Euro 6d-Temp que entrará en vigor en septiembre de 2019. Dichos motores serán tres gasolina –un 1.0 TSI de 95 CV, un 1.0 TSI de 115 CV y un 1.5 TSI Evo de 150 CV- y un Diesel –un 1.6 TDI de 95 CV-. ¿Quedará cerrada la oferta mecánica con estos propulsores? Es más que probable que no, pues ya se vislumbra un hipotético VW T-Cross. Así podría ser el nuevo SUV deportivo.
VW T-Cross GTI: ¿hasta 200 CV como el Polo GTI?
La primera recreación de cómo podría ser el VW T-Cross GTI corre a cargo del [ilustrador X Tommi-Design]http://xtomi.blogspot.com/). En esta primera imagen, aparece un T-Cross con diversos aditivos deportivos entre los que destaca un frontal con nuevas inserciones decorativas, una parrilla delantera con el logotipo GTI bien visible, unos faldones laterales de discreto tamaño y unas llantas de aleación de nueva factura.
Sobre el interior, por el momento no hay ninguna imagen disponible del hipotético VW T-Cross GTI, aunque es de esperar que adopte gran parte del estilo y del diseño ya visto en el VW Polo GTI.
A nivel técnico, el VW T-Cross GTI debería adoptar un chasis más deportivo, con un nuevo reglaje de las suspensiones y una carrocería más cerca del suelo. Para impulsarse, todo hace indicar que usará el mismo motor que ya emplea el VW Polo GTI, es decir, un propulsor turbo de gasolina 2.0 TSI de 200 CV, que se debería poder combinar con un cambio automático de doble embrague DSG de seis velocidades o con uno manual de seis marchas.
