Electrificación y conectividad. Son los puntos clave alrededor de los que girarán los futuros nuevos Volvo S40 y Volvo XC40 cuando se lancen en una fecha todavía por definir a partir de 2017. Se hará de manera escalonada, con menos de un año de diferencia entre ellos, pero sus responsables no nos han querido aventurar oficialmente en sus cuarteles generales en Suecia (hasta donde nos hemos desplazado para conocer toda su futura familia) si se lanzará primero el Volvo S40 o el XC40.
A mano alzada, durante una cena con unos cincuenta periodistas de todo el mundo (por supuesto, siendo el explosivo mercado chino el que tenía más representantes), resultó que el Volvo S40 pudiera ser el primero: una interesante puesta en escena, un “clínic” en directo, digno de las maneras de los clientes para los que se han diseñado el Volvo S40 y el Volvo XC40, los Millenials. Solo ha faltado que hubiéramos votado a través de la app que cada uno llevábamos en nuestro teléfono, desarrollada ex profeso por supuesto para esta revelación de los conceptos 40.1 y 40.2, a través de la cuál podríamos acceder a todo el dossier de prensa. Correcto, una manera convincente de que Volvo está volcado en la conectividad. Toda la conectividad de la que Volvo presume en los últimos años, de la que está ampliamente dotado el Volvo XC90, se traslada íntegramente a estos futuros Volvo S40 y XC40. Sus responsables hablan de aplicaciones nativas integradas en el coche como Spotify, la completa integración con Apple CarPlay o Android Auto, su colaboración estrecha con Microsoft y nuevos desarrollos como la llave virtual, capaz de abrir o poner en marcha el móvil. Volvo piensa que una generación acostumbrada a compartir constantemente de manera digital, sean apuntes, música, vender lo que ya no quieren o viajar en coche compartido, no entenderían no poder enviar una llave virtual a un amigo que necesite tu coche.
CMA, la nueva plataforma de los Volvo S40 y XC40
Volvo ha desarrollado una plataforma modular completamente nueva, denominada CMA, desarrollada conjuntamente para poder ser utilizado por la marca matriz china Geely en sus modelos para China. Es una base tecnológica desarrollada a partir de la versátil superior SPA, de la que nacen los modelos Volvo XC90 e inferiores, pero que sería demasiado costosa para competir con éxito en el disputado segmento de los coches compactos. Así que Volvo ha aprovechado que empezaba de cero para que la plataforma CMA pudiera, sin más cambios posteriores, fabricarse con propulsión eléctrica o híbrida.
Casi tan atípico como este planteamiento inicial es la presentación de un coche colocado boca abajo. Era la manera de Volvo de mostrarnos claramente las baterías que llevarán los S40 y XC40 eléctricos. Ofrecerán una autonomía en torno a los 500 km oficiales y se lanzarán en 2019. A diferencia del Tesla, que cubren toda la parte inferior del coche, las baterías de los Volvo eléctricos se alojan en el túnel de transmisión en su mayoría, desbordando hacia los lados, bajo los asientos posteriores, en el lugar que ocuparía el depósito de combustible. Con ello los Volvo XC40 y S40 disfrutarán de un habitáculo casi inalterado. Además, como el Tesla que vimos aparcado en el aparcamiento del centro de diseño de Volvo en Gotemburgo, podrá disponer de dos maleteros, uno delante y otro detrás, porque el motor eléctrico apenas ocupa espacio delante bajo el capó.
Para que el espacio interior sea confortable y espacioso, a pesar de la presencia de las baterías, todo el coche está levantado, con unas proporciones tan atípicas como el propio planteamiento del coche. Para abrir boca, el responsable de diseño de Volvo ironizó mostrando el mismo zapato en distintas tallas para explicar la gama de modelos de una marca tradicional alemana. Al llegar el turno del S40 y el XC40, el lujo de la gama XC90, S90 y V90 una suela gruesa, blanda, en contraste con el trabajado zapato clásico inglés… pero en llamativo color blanco. Así se explica que el contraste de colores sea una de las características de S40 y XC40, que nadie malpensado busque paralelismos con el exitoso Range Rover Evoque.
Volvo hibrido enchufable: 50 km eléctricos
Volviendo a las mecánicas, por supuesto, que habrá Volvo S40 Diesel y Volvo XC40 Diesel, “no se puede luchar contra la realidad actual en Europa”, pero creen que los jóvenes no les perdonarían esta oportunidad para electrificar sus coches. Así que, la segunda de las novedades será el T5 Twin Engine, un híbrido enchufable de tracción delantera y unos 250 CV, capaz de hacer 50 km en modo eléctrico. Toda la mecánica va en un paquete compacto en el tren delantero. Batería y electrónica son nuevas, desarrollos a partir de la experiencia del T8, el híbrido enchufable del XC90, con la batería dispuesta también en el túnel de transmisión. La caja de cambios es automática de doble embrague de siete marchas, de nuevo desarrollo. Un motor eléctrico de 55 kW colocado sobre la caja de cambios está enganchado a esta mediante engranajes, con la posibilidad de mover el coche exclusivamente con él. También puede sumar la potencia al motor de gasolina o estar desacoplado y dejar el funcionamiento al motor de gasolina. Este motor de 180 CV es totalmente nuevo, de tres cilindros, inyección directa y turbo. Por supuesto, forma parte de esa única familia de motores que utilizará Volvo, DriveE, a la que se ha quitado un cilindro. Bloque más rígido y árboles de equilibrado son sus principales modificaciones. Todo esto para poder conseguir unas emisiones de CO2 menores que un Diesel equivalente. Este motor de tres cilindros también se usará sin hibridación y gracias a la modularidad, lo podrás encontrar no solo en la familia 60, sino que terminará alcanzando a la serie 90.
Antes de despedirnos, nos confirman también que la plataforma CMA que por fin podemos ver “vestida” con los conceptos Volvo 40.1 y el Volvo 40.2 también podrá adoptar tracción total, una demanda global creciente. Y ya se sabe, la generación de los Millenials es la de gustos más globalizados que haya existido nunca.