Nuevo Skoda Octavia, más premium

El Salón de París muestra un ‘restyling’ del Skoda Octavia centrado en el diseño exterior, en un equipamiento más completo y en nuevas mecánicas de gasolina. Estas modificaciones en el equipamiento acercan al Octavia al Skoda Superb, la nueva gran berlina de la marca presentada también en París.

Nuevo Skoda Octavia, más premium
Nuevo Skoda Octavia, más premium

Han pasado doce años desde que el primer Skoda Octavia, una de las berlinas más exitosas de los últimos tiempos, viese la luz. Tan buena acogida tuvo en el mercado en su poco más de una década de vida, que se comercializaron dos millones de unidades de este modelo y, ante la fuerte demanda, primera y segunda generación convivieron juntas en el mercado.

Ahora, cuatro años después del nacimiento de la segunda generación, en el Salón de París se presenta un ‘restyling’ del Octavia. Los cambios, tanto estéticos como mecánicos y de equipamiento, le acercan a la nueva novedad presentada en la muestra parisina, el nominado a Car Of the Year 2009 Skoda Superb.

No obstante, esta puesta al día del Octavia no llegará al mercado hasta 2009. Respecto al precio, el fabricante checo ha asegurado que no será mucho mayor que el actual.

El lavado de imagen del Octavia se ha centrado en la parte frontal, dejando la zaga casi idéntica respecto al modelo que ya conocemos. Los cambios se focalizan en el grupo óptico (faros, intermitentes y antinieblas). Además, la marca checa ha anunciado que podrá montar luces diurnas y de iluminación en curva.

La parrilla será ahora más marcada, contando con 19 tiras verticales, y enmarcada por unos bordes cromados. Así mismo, se han incluido modificaciones en la rejilla inferior y en los espejos retrovisores.

La gama de colores se amplia con nuevos valores cromáticos y, de la misma manera, se ofrece mayor abanico de llantas de aleación y tapacubos.

El interior del nuevo Skoda Octavia ha supuesto, a grandes rasgos, un aumento de calidad. Gran parte del nuevo equipamiento es idéntico al del Superb. Los cambios se han centrado en el volante, en los relojes y en el mando del climatizador. Como elementos innovadores destaca el equipo de entretenimiento y de audio y los asientos.

El volante es el mismo que el del Skoda Superb. Su diseño se caracteriza por un ribete cromado, el logotipo de Skoda en relieve, los cuatro radios y los mandos del equipo de música y del teléfono (lo que nos permite suponer que llevará sistema Bluetooth integrado en esta nueva versión).

Los relojes también se basan en las líneas del Superb, así como los mandos del climatizador, los cuales también equipan otros modelos del grupo Wagen como el Volkswagen Golf VI y el VW Passat CC.

El equipo de audio ha sido mejorado y es compatible con reproductores MP3, iPod y memorias USB a través del dispositivo MDI. Skoda ha afirmado que éste se ofrecerá en un amplio abanico de versiones: blues, swing, bolero, amundsen y columbus (las tres últimas incorporan pantalla táctil).

Los asientos, de nuevo diseño, presentan un acabado más ergonómico. Los delanteros incluyen reposacabezas activos y los traseros mejoran gracias a un reposabrazos central, debajo del cual se ha añadido un compartimento de almacenamiento.

En el apartado de la mecánica, los cambios han sido mucho menores y sólo afectarán a las variantes de gasolina. Su gama de motores se ha ampliado con un propulsor 1.4 TSI de 120 CV, que podrá combinarse con el innovador DSG de siete marchas.

Por su parte, el resto de variantes de gasolina serán el 1.4 MPI de 80 CV, el 1.6 MPI de 102 CV, el 1.8 TSI de 160 CV y el 2.0 de 200 CV de la versión RS.

En las versiones Diesel no hay novedades, siguen el 1.9 TDI de 105 CV, el 2.0 TDI de 140 CV y el 2.0 también TDI de 170 CV.