La estrategia de electrificación en toda la gama Renault va tomando cuerpo, y en el Salón de París hemos sido testigos de ello. La marca francesa anunció allí esta semana que los modelos Clio, Captur y Mégane contarían próximamente con versiones híbridas enchufables, pero por encima de todo presentó un futuro SUV eléctrico, que promete ser barato y universal: el K-ZE. De inicio se venderá en China, pero llegará a más mercados como nueva propuesta alternativa de la marca. Y ahora, además, parece que no llegará solo.
Y es que, según confirma hoy el prestigioso medio Autocar, Renault podría lanzar otro SUV 100% eléctrico, pero esta vez en el segmento compacto. Así al menos lo confirma el propio jefe de ventas eléctricas de Renault, Gilles Normand. “El Zoe es del segmento B (utilitarios), por lo que necesitamos bajar al segmento A (ciudadanos) con el K-ZE, pero también debemos subir un poco. Nuestra estrategia es muy clara: queremos cubrir los segmentos clave en Europa, los segmentos A, B y C", asegura Normand.
Renault SUV eléctrico: más de 500 km de autonomía
El éxito del Zoe, que ya es el eléctrico más vendido de Renault, tendrá así por tanto continuidad. Y la estrategia que estaría planteándose la marca del rombo sería la misma que con él: es decir, lanzar un modelo específico en el mismo segmento y no una versión, como no la es el Zoe del Clio. Contando por tanto con el Kadjar ya en el segmento, Renault estaría estudiando ahora desdoblar su oferta de SUV compactos con este otro modelos que, bajos unas dimensiones y un concepto funcional muy parecido, represente este tipo de movilidad.
Renault además considera que un SUV es la carrocería que debería representar este eléctrico compacto, y no la de una variante hatchback como el Mégane. “La tendencia mundial de la industria es seguir desarrollando SUV, por lo que claramente ir en la dirección SUV es una buena tendencia", subraya Gilles Normand.
De las primeras informaciones que llegan desde Francia, se desprende que este futuro SUV eléctrico se desarrollaría a partir de la arquitectura CMF-EV, compartida por la Alianza Renault/Nissan y Mitsubishi. Sin nombre de momento asignado al SUV ni al proyecto, el objetivo de Renault pasaría porque este vehículo cero emisiones, como el resto que lance al mercado, presente ya una autonomía eléctrica de más de 500 kilómetros. Ese es su reto para los próximos 4 años.