Mercedes Clase A

A los cuatro años de su debú, el Clase A ha pasado por el “obligado" restyling. Lógico, y su actualización refresca su imagen, pero ante todo responde su puesta al día a los nuevos compromisos medioambientales.

Mercedes Clase A
Mercedes Clase A

Antes de comentar lo que la vista nos enseña, conviene reparar en los cambios que la nueva gama Clase A propone para responde al guión evolutivo de nuestros días: consumir menos combustible y por añadidura emitir menos gramos de CO2. Por la enorme lógica de su planteamiento, ya hemos comentado lo eficientes que nos han parecido los sistemas star/stop cuando los hemos probado y el nuevo Clase A, inicialmente en sus versiones de gasolina A150 y A170, ya tiene fecha en otoño para incluir este sistema que, recordemos, para el motor en las detenciones absolutas del coche, por ejemplo en los semáforos o en las paradas de los atascos, y lo pone en marcha de inmediato en el momento que acariciamos el pedal del embrague. Con este sistema, Mercedes anuncia hasta un 9 por ciento de ahorro de gasolina en ciudad en esos nuevos A150 y A170. Para las versiones Diesel, no está previsto por ahora la adopción de este sistema de parada del motor. Y no sabemos si es una cuestión de tiempo o si excluyen voluntariamente este sistema en los motores Diesel por la relativa incomodidad que supone una sucesión repetitiva de la puesta en marcha de un motor de gasóleo por su mayor brusquedad. Aunque es cierto que BMW sí lo ofrece en los Serie 1 y Mini Diesel.En cualquier caso, la gama Diesel no se queda anclada. Hablan de mejoras en la gestión electrónica de la inyección que prometen mejores consumos. Y como plato fuerte, han aplicado a la versión 160 CDI de 3 puertas un paquete de soluciones que recibe el nombre de Blue Efficiency con el claro objetivo homologar menos de 120 gramos de CO2 (homologa 119 y 4,5 l/100 en ciclo mixto) y por tanto queda excluido de pagar el impuesto de matriculación. Son nuestros tiempos. Ese paquete Blue Efficiency gestiona a su manera la aerodinámica, la resistencia de rodadura, la eficiencia del motor y el peso. Que sepamos, la calandra es diferente, más cerrada para restringir la entrada del aire al vano motor pero sin penalizar la refrigeración del radiador; la suspensión es mas corta (la carrocería baja 10 mm para mejorar la aerodinámica) y el alternador sólo se acopla en fases de deceleración y frenada para no restar energía en aceleración. De lo que se ve, pues lo esperado. Se anuncian nuevos faros y pilotos, que para nada rompen con el estilo conocido, que dadas sus formas implican también nuevos paragolpes. La calandra delantera también es nueva, como la toma de aire inferior, ahora más grande. Por dentro, se ha trabajado para transmitir una mayor calidad, con nuevos tejidos, y gana funcionalidad con una guantera de mayor capacidad que aparece en la consola central. El equipamiento se pone al día con una nueva luz de freno de emergencia, que funciona en fuertes frenadas por encima de los 50 km/h emitiendo una secuencia de destellos. Como en otros Mercedes, ahora la iluminación ambiental del habitáculo se enciende automáticamente en caso de fuerte accidente para ayudar a los pasajeros a orientarse.El control de estabilidad incluye un asistente de arranque en cuesta y también podrá disponer de un sistema inteligente de aparcamiento como el que conocemos en Volkswagen, con giro automático del volante y avisos acústicos. El equipamiento multimedia se ajusta al avance imparable de esta tecnología. El sistema de navegación convencional leerá discos DVD en una nueva pantalla a color y con el sistema Comand, toda la cartografía de Europa se almacena en un disco duro. Control de voz, reproductor MP3, conector USB, al fin y al cabo es lo que se demanda hoy día.