Un escalón por debajo del extraterrestre Agera R (1.156 CV) y uno por encima del Agera (973 CV), la marca sueca de superdeportivos ha realizado pequeños cambios en el Agera S 2014. Los últimos adelantos tecnológicos y un diseño espectacular son los dos principales atractivos de uno de los coches que se coloca por méritos propios en el Olimpo del automóvil.
La utilización masiva de fibra de carbono y de otros materiales resistentes pero muy ligeros en el Koenigsegg Agera S dan como resultado final un peso en vacío de 1.330 kg. La fibra de carbono está presente en su totalidad en el chasis monocasco, mientras que en la carrocería comparte protagonismo con el kevlar, un material tan liviano pero con tal alto grado de resistencia, que se viene utilizando desde hace ya varios años en la fabricación de los chalecos antibala de policía, ejército y agentes de las fuerzas especiales. Como curiosidad, las llantas de aleación también dan la bienvenida a la fibra de carbono, en este caso, montadas en unos neumáticos de altas prestaciones Michelin Supersport de medidas 265/35 R19 delante y 345/30 R20 detrás. Este calzado deportivo está preparado para rodar con cierta frecuencia por encima de los 420 km/h, ni que decir tiene que este misil sueco alcanza dicha velocidad máxima casi 'sin despeinarse'.
Además de la gran ligereza, para que el Koenigsegg Agera S 2014 pueda lograr unas prestaciones de infarto, intervienen otras variables importantes como son el componente mecánico y la aerodinámica. El corazón que impulsa al Agera S es un motor de gasolina 5.0 V8 biturbo con una centralita electrónica optimizada hasta el límite, con el gran resultado final de 1.044 CV. El par motor máximo declarado se queda en unos impresionantes 112,16 mkg a 4.100 rpm. Todo este arsenal de fuerza se transfiere a las ruedas traseras a través de un cambio automático de doble embrague de siete marchas. Un diferencial electrónico de deslizamiento limitado sobre el tren posterior también aporta su granito de arena en pos de lograr mayor motricidad y, por tanto, mayor dinamismo.
Con todo ello, las prestaciones oficiales del Koenigsegg Agera S no son aptas para cardíacos, con una aceleración de 0 a 100 km/h en 2,9 segundos, un "sprint" de 0 a 200 km/h en 7,9 segundos y una aceleración de 0 a 300 km/h en 22,7 segundos, mientras que la velocidad máxima supera los 420 km/h.
La aerodinámica es otro de los componentes en los que Koenigsegg ha trabajado a conciencia. En el Agera S, tanto el gran alerón trasero como los deflectores delanteros se ajustan y cambian de posición según las necesidades. Al respecto, la firma escandinava anuncia una fuerza lateral de 1,6 g, mientras que el coeficiente aerodinámico Cd varía entre los 0,33 y los 0,37.
Por último y como suele ser habitual en las últimas obras de arte realizadas por Koenigsegg, el ligero techo de fibra de carbono del Agera S se podrá quitar a gusto del afortunado propietario, por lo que esta obra maestra de la ingeniería ofrecerá la versatilidad de un coupé deportivo o de un roadster biplaza. Para los amantes de lo curioso y anecdótico, Koenigsegg eligió la palabra Agera en clara conexión del término griego "Ageratos", cuyo significado se traduce como "eterno".