Basado en la cuarta generación del Ford Focus, presentada a lo largo de 2018, le toca el turno a su versión deportiva ST, disponible en versiones de carrocería de cinco puertas y Sportbreak o familiar. En ambos casos, su inicio de comercialización tendrá lugar el próximo verano.
En el desarrollo del nuevo Ford Focus ST 2019, los máximos responsables del departamento especial Ford Performance han intentado aunar diversión en la conducción con la versatilidad y la practicidad para conducir en el día a día, dos cualidades que se suelen exigir a un coche compacto del segmento C.
A nivel mecánico, el Ford Focus ST 2019 se desdoblará en dos alternativas. En primer lugar, para los amantes de la gasolina estará disponible un nuevo y optimizado motor turbo 2.3 EcoBoost de cuatro cilindros de 280 CV de potencia y 420 Nm de par máximo, lo que supone que estamos ante el Focus ST más potente de la historia. Este motor EcoBoost está dotado de un turbocompresor de doble entrada que tiene una válvula de descarga controlada electrónicamente. En cuanto a prestaciones, la firma del óvalo asegura que puede acelerar de 0 a 100 km/h en menos de seis segundos.
En segundo lugar, para los que prefieran el Diesel esta versión deportiva ST del Focus podrá estar animada por un bloque 2.0 EcoBlue de cuatro cilindros, 190 CV de potencia y 400 Nm de par máximo.
El tipo de tracción en el nuevo Ford Focus ST 2019 continúa siendo en las ruedas delanteras. De forma paralela, interviene un nuevo diferencial electrónico de deslizamiento limitado (eLSD), un dispositivo que permite mejorar la motricidad y la estabilidad en curvas tomadas a gran velocidad (este diferencial sólo estará disponible inicialmente en la versión ST EcoBoost de gasolina). En el caso del Focus ST 2019 Diesel EcoBlue, llama la atención el sistema Torque Vectoring.
Ford Focus ST 2019: cambio manual o automático
El tipo de cambio al que se podrá acoplar el Ford Focus ST 2019 será uno manual de seis velocidades o uno nuevo automático de nuevo desarrollo de siete marchas. De forma adicional, el conductor que se ponga a los mandos podrá hacer uso del nuevo programa de conducción con varios modos de funcionamiento, con los que se cambia el carácter y la personalidad de este compacto deportivo. Estos modos de conducción seleccionables son Wet, Normal, Sport y Track y, en función de uno o de otro, se varían los parámetros de respuesta del acelerador, de la dirección, del cambio automático, de la suspensión adaptativa y del ESP.
Los cambios realizados a nivel de chasis en el Ford Focus ST 2019 son múltiples. Los amortiguadores de las suspensiones, por ejemplo, pasan a aumentar su porcentaje de firmeza en un 20% en el tren delantero, mientras que en tren posterior lo hace en un 13 por ciento. En la variante de cinco puertas con motor EcoBoost de gasolina, el sistema de amortiguación es variable y controlado a través de un sistema electrónico. En cuanto a la dirección, Ford asegura que es aún más rápida y precisa, mientras que en el capítulo de la frenada se emplean unos discos de mayores dimensiones con un diámetro de 330 mm en las ruedas delanteras y 302 mm en las ruedas traseras. En cuanto a su “calzado deportivo", el nuevo ST 2019 incluye neumáticos de altas prestaciones de la firma Michelin (en este caso, unos Pilot Sport 4S) montados en llantas de 18 pulgadas de serie (opcionalmente, de 19 pulgadas).
A nivel de diseño, el Ford Focus ST 2019 incluye el aspecto típico que suele distinguir a las versiones deportivas, por lo que no faltan unos paragolpes sobredimensionados, unos faldones laterales, un alerón posterior de nueva factura, salidas de escape específicas y llantas de aleación de diseño también diferente al resto de versiones más civilizadas de la gama Focus. El interior también cuenta con sus propias señas de identidad deportivas a través de unos asientos del especialista Recaro, cuadro de instrumentación específico, pedales de aluminio y el logotipo ST bien visible en varios lugares estratégicos del habitáculo.
Los rivales del nuevo Ford Focus ST 2019 en el mercado son vehículos como el Peugeot 308 GTi, el Hyundai i30 N, el Seat León Cupra y el Renault Mégane R.S.