Apunta esta fecha en tu calendario: primavera de 2019. Parece muy lejana… pero estará aquí en apenas un año y medio. Será entonces cuando BMW lance al mercado la tercera generación de su compacto estrella, el Serie 1, poco después de haberlo presentado oficialmente y por todo lo alto en el Salón de Ginebra de ese año, en marzo. Y no será, ni mucho menos, otros Serie 1 más.
Cambio por completo de ciclo y bienvenida al Serie 1 a la era de los nuevos coches compactos y medios de BMW. Si hace apenas dos meses asistimos ya a la renovación del compacto alemán (mero lavado de cara para continuar con el mismo modelo que vio la luz en 2015), esta vez toca ya sí nuevo coche por completo. Y, como toda novedad del grupo en el segmento, a estrenar también nueva plataforma. Como antes el X1, el Mini Contryman, el Serie 2 Active Tourer…
Lo más novedoso para el BMW Serie 1 de esta nueva plataforma es que, por primera vez, el compacto abandona la propulsión trasera y los motores longitudinales para acoger la nueva estructura de tracción delantera y motores transversales. Quizá por ello podríamos pensar que BMW mantiene su línea de dulcificar las reacciones de sus modelos, mostrando un paso más hacia el confort de marcha y el equilibrio. Quizá sea verdad. Pero sus ingenieros prometen contraprestaciones….
Más ligereza para el BMW Serie 1
Sí, porque según hemos podido saber, el nuevo BMW Serie 1, ya sin propulsión trasera, tendrá una importantísima puesta a punto durante su desarrollo. La marca quiere que compense dinámicamente, por lo que, para empezar, intentarán hace valer la mayor ligereza que promete la nueva plataforma: entre 50 y 100 kg. Al mismo tiempo se está trabajando también en mejorar notablemente la distribución de pesos, que debería (o es el objetivo) acercarse mucho a una proporción 50/50 entre los trenes delantero y trasero.
Junto a todos estos trabajos técnicos, BMW también anuncia un chasis y una puesta a punto muy afinada para un Serie 1 que, internamente, se conoce ya con la denominación interna F40, que sustituye a la F20 anterior. Donde también prometen mejoras de cara a poder competir con más solvencia frente al Audi A3 es en amplitud: con la nueva arquitectura llegan más posibilidades de espacio y se intentarán aprovechar al máximo.
En cuanto a motores, el nuevo BMW Serie 1 seguirá mejorando su eficiencia, prometiendo mejoras de rendimiento y consumo que podrían ser del 5 por ciento. Los motores de 3 cilindros deben ganar más protagonismo en la gama, centrando su oferta en las versiones 1.5 tanto Diesel como gasolina con gastos por debajo de los 4,0 l/100 km. Los bloques de 2,0 litros de cilindrada serán los que marquen ya potencias por encima de los 150 CV.
Por supuesto, en el BMW Serie 1 2019 están previstas también versiones híbridas enchufables que seguirán mejorando sus autonomías eléctricas, así como incluso alguna variante 100% eléctricas. Mini, precisamente, presenta este año en Frankfurt una nueva. Esperemos que la gama también se cierre con estimulantes versiones deportivas, donde la M podría volver a tener protagonismo. Ya queda menos para conocerlo por completo.
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