No llegarán hasta la primavera de 2014 pero ya empezamos a conocer detalles más que interesantes de la nueva pareja de berlinas deportivas de BMW: los nuevos M3 y M4, el primero de cuatro puertas y el segundo como representación deportiva coupé de la también nueva Serie 4.
Comenzarán su comercialización al mismo tiempo con patrones comunes. El más importante, sin duda, lo encontramos en su mecánica: se abandona el motor V8 atmosférico de la anterior generación, a favor del nuevo propulsor de seis cilindros en línea y doble turbo en paralelo, uno para cada tres cilindros. Además, habrá que sumarle la inyección directa, el sistema Valvetronic de regulación del alzado de las válvulas, y el doble Vanos.
BMW ha confirmado más datos: su potencia será de 430 CV, mientras que el par es de 51 mkg –15 mkg más que el anterior 4.0 V8–. Aún no conocemos la cilindrada oficial del motor, aunque hay que decir que este motor de seis cilindros en línea es una evolución del que se estrenó hace unos años en el 335i (con denominación interna N54) y que utilizó, en su primera etapa de comercialización, el doble turbo (de 3,0 litros).
El motor de seis cilindros en línea biturbo para los nuevos BMW M3 y M4 se estirará, según los alemanes, hasta las 7.500 rpm, mientras que el par máximo estará disponible incluso por debajo de las 2.000 rpm. Además de la deportividad declarada, BMW también anuncia una reducción de los consumos de un 25 por ciento.
Este propulsor (N54) pasó a los tres años, en 2010, a ‘desprenderse’ de uno de los turbos, pasando a instalarse uno de mayor tamaño con tecnología Twin Scroll de caracola doble. Ahora se toma la base de ese motor que tuvo problemas de fiabilidad en algunas unidades con los dos turbos; eso sí, reforzado y optimizado, con elementos como el nuevo cigüeñal forjado, más ligero y con mayor rigidez torsional para mejorar las prestaciones.
Los nuevos BMW M3 y M4 son más livianos respecto a sus predecesores, no sobrepasando los 1.500 kg gracias a una carrocería y a componentes más ligeros, además del motor con dos cilindros menos. Aquí también mucho que ver, siguiendo con el aspecto mecánico, el nuevo eje de transmisión, fabricado en CFRP (polímero reforzado con fibra de carbono) y un 40 por ciento más ligero, y las nuevas suspensiones, gracias al uso del aluminio.
La marca germana ha prestado atención a la refrigeración de su nueva mecánica para los M3 y M4. Todo empieza en las grandes entradas de aire ubicadas en el frontal. Además del radiador principal, se han instalado otros radiadores extras para controlar la temperatura de los circuitos de agua, de los turbos y del aceite de la transmisión.
Estamos de suerte porque BMW ofrecerá una caja de cambios manual de seis velocidades (12 kg más liviana), o bien una automática de doble embrague de siete velocidades con función ‘Launch Control’ integrado, así como varios modos de funcionamiento. El cambio manual cuenta con la particularidad de contar con un sistema que, en las reducciones, da un golpe de gas para sincronizar revoluciones. Con este mismo fin, M3 y M4 contarán con la evolución de su tradicional diferencial trasero electrónico –Diferencial Activo M–, que varía el porcentaje de bloqueo de las ruedas según las circunstancias.
La dirección electromecánica y las suspensiones adaptativas M (opcionales) también cuentan con sus propios modos: COMFORT, SPORT y SPORT , que regulan sus parámetros según las exigencias del conductor.