Vídeo: Citroën 2CV y C4 Cactus, ¿vidas paralelas?

La historia de Citroën está llena de mitos. El más importante para muchos, el 2CV, parece tener una continuación en el presente con el nuevo C4 Cactus. ¿Realidad o ficción?

Adrián Lois. Twitter: @loisSr_motor | Fotos: Mikael Helsing

Vídeo: Citroën 2CV y C4 Cactus, ¿vidas paralelas?
Vídeo: Citroën 2CV y C4 Cactus, ¿vidas paralelas?

Los dos coches que ves en las imágenes y que protagonizan nuestro vídeo están separados 60 años en el tiempo pero, aunque no te lo parezca, tienen muchas cosas en común. Y no hablamos sólo del doble chevrón en su frontal, sino de una filosofía que la marca francesa ha sabido transferir de un coche a otro con casi siete décadas de diferencia. Son el 2CV y el C4 Cactus.

Citroën 2CV

El Citroën 2CV nació en 1948 y, durante sus 42 años de vida comercial, se convirtió en todo un mito del automóvil. Su forma de ser estaba bien clara y definida desde el principio: ser el representante del coche ‘low cost’, sencillo, sin más elementos que los estrictamente necesarios, con un diseño original,… pero, a la vez, se convirtió en un vehículo muy capaz. Los terrenos difíciles se convertían en fáciles al volante del 2CV, gracias a sus magníficas suspensiones independientes. La particular forma de inclinar la carrocería en las curvas sigue en la retina de generaciones de conductores que tuvieron la suerte de conducirlo o, simplemente, de admirarlo.

Llegó el año 2014 y Citroën volvía a hacer mucho ruido en el mundo del automóvil, en esta ocasión con el C4 Cactus. La marca francesa vio su hueco en un segmento, el de los SUV, que crece sin límites y que cada vez se presenta más feroz; aquí Citroën puso su toque mágico y creó un modelo original donde los haya, también sencillo en su concepción y, como el 2CV, impulsado por pequeñas mecánicas (motores tricilíndricos principalmente). Pero por encima de todo, un coche distinto, y si no echa un vistazo a sus ya famosos ‘Airbumps’ en la carrocería, personalizables en color entre una amplia paleta de tonalidades.

Citroën 2CV y C4 Cactus

El Citroën 2CV protagonista de este reportaje, un AZ-PO de 1955, es propiedad de José Álvarez. Un coleccionista y amante incansable del coche francés. Residente en Badajoz, tiene en su propiedad unas 50 unidades del 2CV, muchas de ellas al borde de convertirse en chatarra, y de las que cuatro ya han sido restauradas. En su interior, no podemos dejar de admirar su pequeñísimo motor de apenas 425 cm3 con carburador monocuerpo, su transmisión de 4 relaciones sincronizadas, su siempre particular embrague centrífugo, sus dos filas de asientos ‘perfectas’ para tomar el sol en la playa, su enorme volante, la elevada altura libre al suelo (¡mayor que la del SUV francés!),…

Un vehículo especial que se pone ahora al lado del presente de Citroën, el C4 Cactus. Historia que hiciste, historia por hacer…