La octava generación del nuevo Audi A6 se presentará oficialmente en el Salón de Ginebra de 2018. Tal y como he podido comprobar unas semanas antes, no sorprende pero sí impresiona. Estética aparte, prácticamente todo lo que trae lo hemos ido conociendo primero en el Audi A8 y hace poco en el Audi A7 Sportback, con los que comparte plataforma y tecnología. Así era antes y así sigue siendo ahora. Sin embargo, al margen de si es sorpresa o no, el nuevo A6 se ha convertido en una berlina con una apabullante carga tecnológica, dando un salto de gigante con respecto a la anterior generación.
El nuevo Audi A6 2018 mejora en los aspectos habituales en un cambio generacional, como puede ser el comportamiento, la seguridad o la eficiencia, pero en cuestión de digitalización crece mucho más al ofrecer un elevado nivel de conectividad, automatismo e interactividad con los pasajeros, especialmente el conductor.
El Audi A6 2018 no cambia sus proporciones y sí su diseño. Es apenas 7 mm más largo, 12 más ancho y 2 más alto que antes, por lo que mantiene ligeramente el tamaño. Mejora algo el espacio interior y mantiene el volumen del maletero de la anterior generación, ahora con más anchura interior. Modifica su diseño con una carrocería llena de atractivos pliegues, mucho más musculosa, que recuerda en su parte trasera al mítico Audi S1 de los 80 por los marcados pasos de rueda traseros a los que las imágenes no hacen toda Lajusticia; al natural llaman más la atención. Los faros se estilizan todavía más, y es que la tecnología Led permite reducir su tamaño (ofrece tres tipos de Led diferentes) y ocupar menos espacio. Así, logra bajar su coeficiente aerodinámico, que pasa de 0,26 a los actuales 0,24. Se fabrica en la factoría alemana de Neckarsulm, con una mezcla de aceros de alta resistencia y aluminio. De este último material son las aletas, los capós, las copelas, los brazos de la suspensión y las pinzas de freno delanteras.
Audi A6 2018: todas sus versiones micro híbridas
Hasta que llegue el híbrido, inicialmente tendrá cuatro motores, de los cuales uno es gasolina y tres Diésel. ¿Quién dijo que el gasóleo estaba muerto? Todos ellos recurren al cambio automático, la tracción total (al menos al inicio) y la micro hibridación; se trata de un motor-alternador asociado a una batería de iones de litio, con una capacidad de recuperación de hasta 12 kW. Con él ahora se puede parar el motor por completo al levantar el pie del acelerador entre 55 y 160 km/h y hasta 44 segundos, entre otras funciones. Con esto en Audi aseguran un ahorro de 0,7 litros de media sin haber perdido prestaciones. Suena bien. Al inicio se ofrecerá con los V6 de gasolina y Diesel de 340 y 286 CV respectivamente, para en junio estrenar el V6 45 TDi de 231 CV y el cuatro cilindros 40 TDi de 204 CV.
Salvo el motor de 4 cilindros, el resto funcionará con la red interna de 48 voltios, de ahí que puedan llevar en un futuro no muy lejano los diversos sistemas que la marca tiene preparados para sus mecánicas, desde turbos eléctricos a sistemas de distribución o, incluso, las estabilizadoras activas que lleva el Q7. Dispone de 4 configuraciones de suspensión (muelle normal, muelle deportivo, amortiguadores de dureza variable o muelle neumático). Añade de serie la dirección de desmultiplicación progresiva y estrena la dirección en las cuatro ruedas, como ya hiciese su rival BMW Serie 5 en la anterior generación. Con un sistema de cremallera es capaz de girar las ruedas traseras hasta 5º, unas veces a favor y otras en contra de las delanteras, en función de la velocidad. A esto se suman hasta 38 sistemas de asistencia a la conducción diferentes, formados por controles de tracción, estabilidad, gestión del par, etc. Entre ellos, además de los controles de crucero adaptativos y semiautónomos (nivel 3) hay dispositivos curiosos, como el aparcamiento remoto (desde fuera del coche y a través del móvil) o el Parking Pilot, pensado para que entre y salga del garaje él solo.
Audi A6 2018: mucha tecnología
Para entrar en el nuevo Audi A6 2018 se puede elegir el Audi Connect Key, que nos permitirá abrir el coche desde el móvil (Android), desde hasta 5 dispositivos diferentes. El interior disfruta de una calidad de acabado exquisita. Los botones comunes desaparecen y en su lugar aparecen las pantallas táctiles y hápticas; se trata de una pantalla lisa que al tocarla generar una sensación de “click” en el dedo como prueba de que se ha seleccionado dicha opción. Todo el sistema MMI es configurable. Ahora hay tres pantallas digitales: la habitual del cuadro de relojes, la central superior y la inferior. En la del cuadro se aloja el Virtual Cockpit que ya conocemos de otros modelos, con mejorada calidad y definición. Se pueden personalizar hasta 400 parámetros, con siete memorias de ajuste diferentes. Para ello basta con seleccionar con el dedo lo que queremos, arrastrarlo y moverlo, como si de una Tablet o un móvil se tratase en cualquiera de las pantallas centrales. También hay control por voz, al estilo de sistemas como el Siri de Apple, desde el que se accede a muchas funciones del coche. De serie incluye un sistema de navegación, que se puede ampliar con el MMI Navegación Plus. Además de las funciones habituales, en el nuevo Audi A6 el navegador realiza autoaprendizaje de las rutas comunes, ofreciendo distintas sugerencias o alternativas de tráfico. Los mapas se actualizan hasta 6 veces al año gratuitamente de serie. Para la transferencia de datos utiliza el estándar LTE Advanced y ya cuenta con carga inalámbrica para dispositivos móviles. Se pondrá a la venta en marzo y las primeras unidades llegarán en primavera. Por su parte, las versiones menos potentes llegarán en junio.