Uno de los portavoces del Grupo Volkswagen, Hans-Gerd Bode, ha anunciado que el conglomerado germano va a llamar a revisión 130.000 unidades de sus modelos en todo el mundo por un problema el sistema de frenos.
El fabricante germano ha señalado que existe un chip electrónico en el sistema de frenado que "puede sobrecalentarse y causar que algunos elementos ardan. En el peor de los casos, el automóvil podría incendiarse". Según estas mismas fuentes, este extremo aún no se ha dado, por lo que no se han producido ningún tipo de lesiones hasta el momento.
Los modelos afectados son algunas unidades del Volkswagen Golf, New Beetle, Bora, Audi A2, Seat León, Toledo y Skoda Octavia. La mayoría de los automóviles llamados a revisión (90.000) se han vendido en los Estados Unidos, cerca de 9.500 unidades lo hicieron en Brasil y unas 1.000 en el mercado alemán.
En España, las unidades afectadas son 15.000 de Volkswagen (la mayoría Golf y Bora), 7.500 unidades de León y Toledo y 2.000 Audi A3. Skoda no tiene modelos con este problema en nuestro país.
Según el portavoz oficial del Grupo Volkswagen, los usuarios afectados recibirán en su domicilio una comunicación de la marca avisándoles de que deben llevar su coche al taller para la sustitución de la pieza defectuosa sin ningún coste.