La firma explicó que esta previsión de pérdidas operativas para el cierre del año fiscal (de abril de 2008 a marzo de 2009) se debe al efecto negativo del tipo de cambio del yen frente a otras divisas, así como a la reducción de la demanda de automóviles en todo el mundo, provocada por la crisis económica.
Este anuncio se produce después de que la corporación informara, el mes pasado, de que lograría un beneficio operativo de 600.000 millones de yenes (4.834 millones de euros).
Toyota prevé un descenso en sus ventas del 4 por ciento, mientras que la producción bajará un 3 por ciento.
Asimismo, el primer fabricante de automóviles del mundo tiene previsto lograr un beneficio neto de 50.000 millones de yenes (403 millones de euros), frente a la anterior previsión de 550.000 millones de yenes (4.435 millones de euros).
Por otro lado, la firma presentó sus estimaciones de ventas de automóviles para el año fiscal 2008-2009, en las que se prevé una reducción del 4 por ciento, con 8,96 millones de unidades. El grupo automovilístico registrará un volumen de producción de 9,23 millones de unidades de todas sus marcas al cierre del año fiscal, un 3 por ciento menos, mientras que las exportaciones alcanzarán 2,77 millones de unidades.