La reducción de los gases que crean el "efecto invernadero" es una de las prioridades de los fabricantes de automóviles, que buscan energías alternativas para la propulsión de los vehículos. Compañías como Opel, General Motors o Renault llevan una década investigando los posibles sustitutos de la gasolina, entre los que se encuentra la pila de combustible. Ahora, la marca gala ha formalizado tres asociaciones con las empresas americanas Nuvera, 3M y Total Fina Elf para continuar avanzando en la obtención de este tipo de energía.
La alianza tecnológica con Nuvera, empresa especializada en la transformación de hidrocarburos, pretende el desarrollo de un sistema de modificación que permita extraer hidrógeno en tiempo real, para adaptarlo después a las limitaciones del automóvil. Este dispositivo permite su utilización con diferentes combustibles (gasolina, gasóleo, gas natural...) y tiene diversas aplicaciones –tracción, prolongación de la autonomía...-. Según los plazos establecidos por Renault, este sistema estará listo en 2004.
Por su parte, la compañía 3M examinará la adecuación del "corazón" de la pila de combustible –la membrana MEA, Membrane Electrode Assembly, que realiza la producción de la energía eléctrica- a las limitaciones de los vehículos (que, actualmente, necesitarían unos depósitos de "combustible" demasiado grandes y pesados, lo que penalizaría sus prestaciones).
La asociación con la petrolera Total Fina Elf se encaminará a analizar el comportamiento de la pila y del sistema de producción de energía en función del carburante. Asimismo, se investigará el impacto que los componentes del dispositivo realicen sobre las prestaciones del vehículo.
Además de las iniciativas de Renault, muchas otras marcas han presentado ya prototipos que funcionan con alternativas basadas en la pila de combustible. Si quieres saber cuáles son, PINCHA AQUÍ.