Los fabricantes japoneses invaden los mercados europeo y americano

Las principales marcas japonesas se encuentran en un momento de expansión, sobre todo en el exterior. Mientras tanto, el mundo occidental experimenta un declive en su producción y continúa demandando automóviles nipones.

El mercado japonés del automóvil está en auge; Los resultados en la primera mitad del año muestran una clara tendencia al alza. Tanto la producción como los beneficios se han visto incrementados, sobre todo, en los mercados exteriores.
Es el caso de Honda, que prevé duplicar su producción en la planta de Alabama para el año que viene. La fabricación en Norteamérica se ha incrementado en un 15 por ciento, aunque su crecimiento global ha sido del 21 por ciento. Por otro lado, su producción en Japón ha experimentado una caída del 15 por ciento y del 20 por ciento en las ventas.

En cambio, el balance de Nissan, con Carlos Goshn en la presidencia, es muy positivo: reduce su endeudamieto y costes y, además, se ha producido una mejora de la gama, lo que ha propiciado un alza del 11 por ciento en las ventas en Japón, por encima de las ventas exteriores (3,1 por ciento). La situación global es de un crecimiento del 6,8 por ciento.

En los primeros 6 meses de 2003, Toyota, que encabeza el ránking nipón, incrementó su producción un 7,6 por ciento. Tiene previsto incrementar su producción en los próximos tres años un 30 por ciento su producción en EEUU a través de su nueva planta de ¿Tejas?. Para este año, prevé una leve caída de su producción global (1 por ciento), y un incremento de las ventas de un 3 por ciento.

El comportamiento de Mazda también es positivo en los mercados exteriores, con un alza del 48 por ciento provocado por la buena marcha de su nueva gama, en especial del Mazda 6, el RX8 de motor rotativo y el monovolumen compacto Primacy. En el mercado local, su situación permanece similar, aunque ha experimentado un leve descenso (1,2 por ciento)
El nivel de ventas de Mitsubishi, cuarto fabricante japònés, mantiene su tono alto tanto en su país como en el exterior.

En Europa, y según la consultora británica Autopolis, la demanda experimentará un retroceso que finalizará con el año que viene, debido, principalmente a la pesimista situación económica de Francia y Alemania. Según este estudio, las ventas caerán un 5,7 por ciento este año y un 2,5 por ciento el año que viene. Pero vaticina una recuperación para el 2005.