A simple vista parece uno de esos todo terreno de grandes dimensiones que proliferan en EE.UU., un modelo que incluso llevan las amas de casa para ir al supermercado, pero basta apretar un botón para que este vehículo se transforme por completo y se convierta en un auténtico "tanque urbano".
Ametralladoras, lanzagranadas, paredes blindadas, teleobjetivos... Para la empresa Ibis Tek</font color="#0000CC">, la "seguridad en el automóvil" adquiere otro significado.
Desde hace tres años, esta compañía estadounidense prepara coches (principalmente modelos de Chevrolet, Lincoln y Ford) con su sistema de defensa, denominado "Cobra". Adapta los SUV para llevar todo tipo de armamento, un arsenal que se puede manejar desde el asiento del copiloto mediante un ordenador y un simple mando.
Aunque su listado de clientes es confidencial, Ibis Tek asegura que, por ahora, ninguno de sus modelos se ha vendido en EE.UU. Sin embargo, este tipo de vehículos es completamente legal en este país: los compradores - con la licencia de armas oportuna - se encargarían de instalar este particular equipamiento.
Sus principales clientes se encuentran en los países de Oriente Medio, por lo que las ventas están reguladas directamente por el departamento de Estado norteamericano. "Tenemos en cuenta que estos vehículos podrían llegar a desestabilizar una región", ha asegurado Jay Greer, portavoz de dicho departamento.
La compañía francesa Thales AFV</font color="#0000CC"> ya se ha interesado en exportarlos.