Hasta ahora, el mercado petrolífero español está controlado por tres compañías - Repsol YPF, Cepsa y BP -, pero Lukoil </font color="#0000CC"> amenaza este imperio. Se trata de una petrolera rusa que posee las mayores reservas de crudo del mundo (a principios de 2001 controlaba 14,24 billones de barriles) y es uno de los cinco productores más grandes del sector.
Además, el mal momento que atraviesa la Opep ha ayudado a que las petroleras rusas se fortalezcan. Cada vez que el cártel decide aumentar sus precios recortando su producción, los máximos responsables de la Organización miran con mucha cautela a Rusia. Si ellos cierran sus pozos, este país aprovecha para aumentar el ritmo de los suyos.
Así, mientras que la Opep ha dejado su cuota de mercado en el nivel más bajo desde 1991, Rusia ha aprovechado para marcar un récord que no alcanzaba desde 1993.
Este enorme potencial permite que empresas como Lukoil ofrezcan unos precios muy competitivos. La petrolera rusa ya suministra productos a algunos operadores españoles y cuenta con una terminal de almacenamiento en Tarragona.
Ahora, Lukoil se debate entre crear una "joint venture" con una compañía ya instalada en España o comprar un paquete de estaciones de servicio.