La UE apoya los centros multimarca

La presión de los concesionarios para rebajar las restricciones y el control de las marcas sobre su libertad de actuación ha tenido éxito. La UE acaba de emitir una nueva legislación que aumenta las posibilidades de los centros de venta para constituirse en auténticos centros multimarca.

En octubre de 2003, la Comisión Europea introdujo un controvertido reglamento con el que se liberalizaba la distribución de automóviles. El objetivo era rebajar las tarifas y armonizar precios dentro de toda la Unión, otorgando el poder a un concesionario de regirse por el sistema de gestión de negocio que quisiera en lugar del impuesto por el fabricante a cuya red pertenecía. En la práctica, le concedía la facultad de constituirse en centro “multimarca" y abrir puntos de venta fuera de su área de concesión.Sin embargo, tras dos años y medio de la entrada en vigor de la normativa, la liberalización buscada no ha sido efectiva. Los concesionarios llevan tiempo acusando a las marcas de prácticas restrictivas y de utilizar todo tipo de presiones para vender únicamente sus productos.La nueva legislación, recién aprobada, estipula con claridad que los objetivos de venta y rentabilidad marcados por el fabricante a su red de centros no podrán impedir que éstos dediquen zonas de sus instalaciones a otras marcas. Del mismo modo, establece que son libres de escoger el sistema de gestión informatizado que deseen.Durante meses, las asociaciones de concesionarios de BMW y de Opel venían presionando a la Comisión para que admitiese que los consorcios BMW y General Motors se estaban extralimitando en sus actuaciones de control, vulnerando la normativa comunitaria. Finalmente, la Comisión les ha dado la razón.Faconauto, la federación de asociaciones de los concesionarios españoles, ha acogido con recelo la noticia. Por un lado, entiende que hay motivos para alegrarse, ya que se le da a las marcas un toque de atención, pero, por el otro, explica que éstas continuarán con sus políticas de presiones y que, ante ello, poco pueden hacer, puesto que nadie se atreverá a llevarles la contraria.

El único medio de hacer la reglamentación realmente efectiva, asegura la federación, es eliminar la discrecionalidad de las comisiones recibidas por el concesionario de manos de la marca. En estos momentos, los fabricantes pueden retribuir hasta un 30 por ciento de los ingresos a su centro de venta. Para ello, aplican una serie de estándares subjetivos, como evaluación del servicio proporcionado o satisfacción de los usuarios, que continuarán siendo el principal medio de presión y control.