Cuando compras un Tesla también adquieres 400 kWh de créditos anuales para la recarga del vehículo, ya sea un Model S o un Model X, en supercargadores de la marca.
Moraleda de Zafayona, Caldes de Malavella y Zaragoza son las tres localidades españolas en las que puedes encontrar la mayor acumulación de puntos «supercharger». En las provincias de Granada y Gerona, en ambos casos, muy cerca de las respectivas capitales provinciales y, también en los dos, en zonas hoteleras —Hotel Paraiso, de dos estrellas; y Hotel Camiral, de cinco, junto al campo de golf PGA de Cataluña—, están las dos primeras agrupaciones masivas de estos cargadores; la otra, en la propia ciudad de Zaragoza, también junto al hotel, El Cisne de tres estrellas.
Entre esas tres ubicaciones se acumula 30 de los puntos de carga de los 106 existentes en la actualidad en España; mientras que en otras cuatro ubicaciones, cada una con otros ocho cargadores, se sitúan 32 más —Tordesillas, Rivabellosa, La Gineta y Cullar—, de modo que en siete localidades Tesla ha situado más del 58 por ciento de sus cargadores gratuitos sólo aptos para sus coches.
Los demás se sitúan en grupos de 6 o 4 —Burgos, Ariza, Torrefarera, Gerona, San Cugat, L´Aldea, Paterna o Churra—, además del, en un único caso, uno de 2 cargadores en Tarragona: todas las estaciones Tesla tienen varios cargadores que trabajan aportan hasta 120 kWh y se sitúan en las proximidades de restaurantes o centros comerciales, siempre con acceso a puntos de enlace Wi-Fi.
Estos supercargadores son exclusivos para los coches de Tesla. Es decir, se puede acceder hasta su situación con cualquier coche —están en vías de uso público, por mucho que puedan ser de propiedad privada— aunque si enchufas tu coche eléctrico y éste no ha sido fabricado por la firma de Silicon Valley de nada te servirá intentar la conexión.
Lo que sí se puede encontrar junto a los supercargadores, en algunos casos, son otros cargadores de uso general que pueden usarse en monofásico o trifásico, de 6 a 32 A —1,4 a 22 kWh— con conector Mennekes (tipo 2). Suelen estar claramente identificados para este propósito como Electric Vehicles por oposición a los exclusivos con el Tesla Vehicles.
Este tipo de cargadores son la opción domiciliaria a los supercargadores públicos. Son los que Tesla llama Wall Connector y cuestan 530 euros. En el caso de que se instalen en la casa del propietario se puede elegir entre cables de 2,5 o 7,5 m, aportando cargas de hasta 16,5 kW —81,5 kmh para Tesla— si la red lo permite. Por lo general, no trabará en monofásico a menos de 7,4 kW —36 kmh para un Model S—.
Los Tesla tienen el Mobile Connector, un cable que se puede utilizar en la mayoría de las tomas de corriente, además de en enchufes trifásicos y un conector Mennekes. Este es el más rápido cuando el Tesla Wall Connector admite la máxima potencia.