Talleres: la escala necesaria

En España hay más de 51.200 talleres de reparación de vehículos. Ahora, con los cambios legales que ha preparado la Unión Europea, el panorama cambia radicalmente para estas empresas. Su gran reto es afrontar estas transformaciones sin que su servicio pierda calidad. Así lo harán.

Más vale prevenir
La Asociación de Talleres de Madrid, Asetra, ha elaborado un sencillo código de seguridad dirigido a los conductores. Con sólo seguirlo, cualquiera puede evitar en lo posible riesgos o inconvenientes mecánicos. Son unos consejos muy fáciles de observar y están divididos en función de las diferentes partes del vehículo:Comprueba las presiones de los neumáticos, adecuándolas a la carga que se vaya a transportar. Siempre es mejor rodar con una o dos décimas de presión de más. Observa que los manómetros están correctamente calibrados y realiza la operación con los neumáticos fríos. Conviene siempre que todos los neumáticos sean del mismo tipo y características, y con un desgaste similar, sobre todo los del mismo eje. Por motivos de seguridad, al sustituir sólo dos neumáticos, se deben montar los nuevos siempre en el eje trasero.Comprueba el correcto nivel del líquido de frenos. Conviene recordar que la mayoría de los fabricantes recomienda sustituir el fluido cada dos años. Es recomendable pedir al taller que revise el grado de desgaste de los elementos de fricción.Hay que verificar el nivel del líquido refrigerante antes de emprender cualquier viaje largo y de forma periódica. No se debe utilizar sólo agua como sustituto, sino que es mejor emplear los productos existentes para tal fin. Observa visualmente posibles pérdidas de líquido refrigerante por manguitos y juntas.Comprueba el nivel de aceite y rellena con el aceite usado habitualmente, sin rebasar el nivel máximo del depósito. Si falta poco para que se cumplan los kilómetros fijados como plazo de reposición del aceite, acércate a cambiarlo antes de emprender cualquier viaje largo. Nunca te encargues tú mismo de la sustitución: el aceite usado es un residuo peligroso.Verifica las luces de señalización, freno e iluminación. Si hace falta, limpia los grupos ópticos. Si detectas pérdida de iluminación, haz revisar y reglar los faros.Las lunas rajadas o con impactos pueden estallar durante el viaje. Comprueba que no tienen ningún problema y trata de mantenerlas limpias.Si tu coche tiene turboalimentación, cuando pares después de muchos kilómetros deja un par de minutos el coche al ralentí antes de apagar el motor. Así, el turbo prolongará su vida.Es conveniente también revisar periódicamente el estado de escobillas limpiaparabrisas, el líquido de este componente y el estado del aire acondicionado.