Sindicatos y Dirección de Landaben, ¿a un paso del acuerdo?

La negociación del convenio colectivo en la factoría navarra de Volkswagen está que arde. Ayer, el Gobierno foral aseguró que actuaría como mediador en el conflicto; los sindicatos creen que, de momento, la cuestión debe resolverse de puertas para dentro, es decir, entre la Dirección y los sindicatos.

Los sindicatos han anunciado paros con el objetivo de desbloquear las negociaciones de su convenio colectivo. El documento no avanza y el Gobierno de Navarra ya se ha ofrecido como mediador en el conflicto.Los trabajadores han sido rotundos: la mejor manera de mediar es “obligar" a que la empresa negocie con los empleados. El presidente del comité de empresa, Jesús Sánchez Bruna, confiesa que, desde los sindicatos, no se había contemplado la posibilidad de que el Gobierno foral mediara, por el momento, y que, de hecho, se han enterado del ofrecimiento “por los medios de comunicación".

Sánchez Bruna reconoce que el convenio de la planta de Landaben, que en la actualidad monta el modelo Polo (en la foto de más abajo), es muy importante para la economía navarra, pero han instado al Gobierno de esta comunidad a que “les dejen la parcela de negociación de sus condiciones de trabajo, porque tenemos derecho a ello como cualquier otra empresa". El principal objetivo de los trabajadores navarros es que se garantice el futuro de la planta después de 2008. En esa época se dejará de montar el actual Polo y no hay más modelos previstos por el momento. La situación, de momento, no es preocupante, pero los empleados quieren asegurar su futuro, porque la estabilidad en esta factoría “tendrá una traducción tanto económica como social para Navarra".

Además, la última propuesta de la Dirección “ya ha situado parte de nuestras reivindicaciones" con lo que ven próximo el final de las negociaciones. No obstante, los sindicatos se han reunido para proponer fechas de movilizaciones, que podrían comenzar la próxima semana, si no se va solucionando el problema antes. Uno de los asuntos candentes en la negociación es el referido a la fabricación de 10.000 unidades adicionales que ofreció Volkswagen. La multinacional ha anunciado que, si no se llega pronto a un acuerdo, retirará la oferta. Los sindicatos aseguran que agotarán las vías de diálogo para que se cuente con más producción.Por si fuera poco, el próximo miércoles se va a celebrar un juicio contra cuatro delegados del sindicatos CGT. Los hechos se remontan al año 2004, momento en el que el jefe de los servicios médicos de la planta denunció a los trabajadores por injurias y calumnias, después de que la CGT publicara un comunicado acusándole de carecer “de las más mínima ética personal y profesional".

Mientras, en la casa matriz, la directiva pasa por una delicada crisis. Los miembros del Consejo de Dirección están enfrentados entre sí y han comenzado los cruces de acusaciones y los contactos entre ellos para conseguir alianzas de cara a una próxima renovación de este órgano.
Volkswagen ha ganado un 60 por ciento más en 2005 que en el año anterior. Sin embargo, estos positivos resultados no van a cambiar la decisión del presidente de la compañía, Bernd Pischetsrieder, de mantener la reestructuración que se está llevando a cabo en la compañía alemana. En palabras del primer ejecutivo de VW, seguir con la reducción de costes "asegura el futuro de la compañía".

Entre los puntos negros de estos resultados están las cifras de Seat. La automovilística española perdió en 2005 62,5 millones de euros y sus ventas cayeron un 11,9 por ciento. Ante esto, el director financiero de Volkswagen,Dieter Poetsch, ha indicado que "el incremento masivo de las pérdidas operativas nos obliga a una nueva ordenación estructural", aunque no ha dado más detalles al respecto. En la factoría de Zona Franca de Nissan están seguros de que la anunciada producción de un vehículo comercial se llevará a cabo en Barcelona. Se trata de un producto que se montará en una factoría japonesa y en otra –aún por definir- que montaría el vehículo a escala mundial.

Según los sindicatos, “todas las noticias que nos llegan son positivas y estamos bien posicionados". De hecho, la factoría catalana ya monta la furgoneta Primastar, que también se vende bajo el nombre Renault Traffic y Opel Vivaro.