Comprar un coche supone asumir que va a pasar la inmensa mayoría del tiempo parado. Por ello, la popularización del carsharing y la necesidad de muchos conductores de conseguir unos euros extra han llevado a que algunos ofrezcan su coche para alquiler por horas o días.
Hace unos días os contamos cómo funciona Getaround, empresa que pone a disposición de sus usuarios una buena cantidad de coches de particulares. En dicha plataforma encontramos vehículos más baratos que con un alquiler clásico y, para no llevarnos disgustos, los propietarios están puntuados en categorías como limpieza, estado general del vehículo o puntualidad.
El carsharing, por tanto, es una buena manera de rentabilizar lo que hemos pagado por nuestro coche, con pequeños alquileres que, en caso de que el automóvil estuviera detenido, nos permiten tener unos euros extra a final de mes. Sin embargo, si estás pensando en darte de alta en una plataforma similar, La Vanguardia ha recopilado algunos problemas con los que te puedes encontrar.
El seguro
Que la plataforma cuente con su propio seguro no te exime de contar con, al menos, el seguro de responsabilidad civil, el cual cubre a los ocupantes del vehículo y los daños ocasionados a terceros. En caso de accidente, debería actuar el seguro de la plataforma de carsharing pero esto se puede complicar si el conductor ha tomado alcohol o drogas, momento en el que pueden lavarse las manos del pago de las indemnizaciones y, por tanto, comprometer al propietario.
Además, ten en cuenta que tu seguro puede entender que se está haciendo un uso indebido del vehículo, sacando un rédito económico que no estaba planteado en un inicio y, por tanto, también puedes tener algunos problemas con el propio seguro de tu coche.
Por último, ten en cuenta que la conducción de los arrendadores también afecta al arrendatario y puede que te quedes sin descuentos o bonificaciones en la renovación de tu seguro porque hayas dado demasiados partes el año anterior como consecuencia de su alquiler.
Entrega y devolución del vehículo
La entrega y la devolución es otro de los asuntos espinosos de este tipo de alquiler. Hay que tener en cuenta que tendrás que pactar con aquella persona que te alquile el coche para entregar las llaves y, del mismo modo, tendrás que volver a quedar con él para la devolución, con los problemas que esto puede acarrearte.
Pero hay un problema añadido, como son los pequeños desperfectos que se hayan generado durante el alquiler o que se hayan realizado más kilómetros de los debidos. Lo mejor, para ambas partes, es que antes de dar comienzo al alquiler se hagan fotografías del interior y el exterior de los coches.
Por último, ten en cuenta que la gestión de las multas también pasará por ti, por lo que debes informarte bien de cómo actuar si te ha llegado una sanción económica. Además, es bueno que compruebes el carné de conducir y de identidad de la persona a la que le estás alquilando el vehículo, ya que pueden existir limitaciones por parte de la plataforma que se estén incumpliendo.