PSC ofrece a Mas un pacto bilateral pero el Govern le recuerda su debilidad

El primer secretario del PSC, Pere Navarro, ha ofrecido hoy al presidente catalán, Artur Mas, un pacto bilateral previo sobre financiación, si bien el Govern ha recordado a los socialistas su debilidad parlamentaria y ha avisado de que no renunciará a un modelo que saque a Cataluña del 'café para todos'.

Mas y Navarro han acordado, en su segunda reunión institucional desde que asumieran sus respectivos cargos, crear una comisión para que representantes de CiU y PSC exploren un acuerdo sobre el pacto fiscal antes de que el Parlament vote, antes de las vacaciones de verano, la propuesta financiera definitiva.

La reunión ha servido para normalizar las relaciones entre ambas partes, que quedaron tocadas a raíz de los pactos entre CiU y PPC sobre los presupuestos catalanes y la composición del consejo de gobierno de la Corporación Catalana de Medios Audiovisuales.

No obstante, en este encuentro, de casi dos horas en el Palau de la Generalitat, ya se ha evidenciado que uno de los mayores escollos para el pacto entre las dos principales fuerzas políticas catalanas será si Cataluña debe salir o no del régimen común de financiación.

Navarro, según ha explicado él mismo a la salida de la reunión, ha propuesto que el Govern obvie el modelo preacordado por CiU, ERC e ICV-EUiA y priorice un entendimiento con el PSC, partiendo de la base de que un acuerdo entre las dos grandes formaciones de Cataluña daría al país mayor fuerza negociadora ante el Gobierno español.

Por ello, el PSC exige que el acuerdo no pase por su adhesión al borrador de pacto fiscal aprobado por el Parlament el pasado otoño con los votos de CiU, ICV-EUiA y ERC, sino que consista en buscar un denominador común entre las respectivas propuestas de Govern y PSC.

Navarro ha dejado claro que una de sus líneas rojas será que la propuesta de financiación de Cataluña no lleve a un escenario de 'ruptura social o enfrentamiento' con el Estado.

Hace meses que Mas insiste en sus llamamientos al PSC a sumarse al consenso político y social en torno al pacto fiscal, pero hoy ha dejado claro que atraer al PSC al frente catalán no debe hacerse a costa de descafeinar la propuesta financiera que defiende el Govern.

Lejos de morderse la lengua tras la reunión entre Mas y Navarro, el portavoz del Govern ha advertido al PSC de que la Generalitat no renunciará a un pacto fiscal que saque a Cataluña del 'café para todos' autonómico y ha recordado a los socialistas su debilidad parlamentaria en la actual legislatura.

Para visualizar que el PSC, con sus 28 diputados sobre 135 en el Parlament, se encuentra en una posición de debilidad que le impide reivindicar un papel análogo al que puede jugar el PSOE como gran fuerza opositora en las Cortes, Francesc Homs, portavoz del Ejecutivo catalán, ha recordado que el pacto fiscal que defiende el Govern ya cuenta con una amplia mayoría.

Los 62 escaños de CiU, sumados a los 20 de ICV-EUiA y ERC, además de los 3 de Solidaritat Catalana per la Independència (SI) y Joan Laporta, suman 86 diputados, 18 por encima de la mayoría absoluta.

Frente a eso se sitúan los 21 diputados de PPC y Ciutadans y, entre medio, los 28 diputados del PSC: 'A veces en la vida hay que ceder para incorporar una mayoría muy grande, pero la fuerza del PSC no es demasiado más que la suma de ICV-EUiA y ERC', ha insistido.

Homs ha enfatizado que una de las líneas rojas negociadoras para el Govern será otorgar a Cataluña un modelo de financiación propio, al margen de la Ley Orgánica de Financiación de las Comunidades Autónomas (LOFCA).

Mas y Navarro han aprovechado su encuentro para hablar además de las perspectivas económicas y, en este sentido, el líder socialista ha propuesto una cumbre con los líderes políticos, económicos y sindicales del país para abordar los recortes, el pacto fiscal, el blindaje de los servicios públicos y el encaje Cataluña-España.

Navarro le ha pedido 'coraje' para que alce su voz en contra de la severa política de austeridad dictada desde Europa y defienda medidas de reactivación, a lo que Homs ha replicado: 'La voz ya la levantamos, pero las reglas las marcan otros'.

No dar por muerta la negociación entre CiU y PSC sobre la ley electoral ha sido otro de los puntos tratados en el encuentro.