Peugeot 308, disponible en otoño

El sustituto del Peugeot 307 no cambia de forma radical, pero acentúa su personalidad de turismo perdiendo altura en su carrocería. Tras él llegarán versiones monovolumen y semi-SUV, además de la imprescindible versión familiar.

Peugeot 308, disponible en otoño
Peugeot 308, disponible en otoño

Presto a ser mostrado de forma oficial, el nuevo Peugeot 308 en su versión de cinco puertas es la avanzadilla de una nueva familia con el tres como inicial guarismo. Pese a una silueta relativamente similar a la del 307, la estética del 308 recibe detalles que la personalizan de manera muy diferenciadora.El morro recibe una V muy marcada, más pronunciada que la mostrada en el 207 y con el vértice saliente sobre una gran boca de aireación, acentuando su parecido con vehículos de competición. Cuenta con grupos ópticos agresivos, tanto los principales, como los faros antiniebla, que ocupan una posición similar a las de las branquias de refrigeración para los frenos. La parte posterior resulta menos provocadora, aunque en el diseño de la luneta se ha responsabilizado el acento de originalidad. La imagen del habitáculo presenta un diseño relativamente continuista pero que denota un mayor énfasis en el detalle y la simplicidad de líneas. El techo panorámico de cristal ya anuncia una tendencia parece que imparable en los modelos a venir.Pero la evolución más radical se encuentra en la adopción de una altura más recortada. Esto, que a simple vista no parece una modificación muy profunda, cambiará radicalmente la habitabilidad del coche. No hay más que tomar al 207 como referencia y veremos que con menor altura, las plazas delanteras van más tendidas, ocupando un mayor espacio hacia la parte trasera del habitáculo, y recortando la habitabilidad de los usuarios de las plazas traseras, lo que, pese al crecimiento de la longitud del coche hasta los 4,3 metros, significará un peor confort para aquéllos.Por el contrario, aunque la batalla es igual a la del 307, un centro de gravedad más bajo y una apuesta menos decidida por el confort deberá generar un comportamiento dinámico aún mejor. Pero el cambio más radical lo encontraremos en la vertiente mecánica, en particular, en su capítulo de gasolina. Ahí, se dará entrada a los motores desarrollados en colaboración con BMW, cuyo protagonismo lo integra la inyección directa de gasolina y el turbocompresor, en buena parte de los casos.Desde 120 hasta 220 CV, la oferta será profusa. Y del lado del gasóleo, al abanico se extenderá desde los 90 hasta los 170 CV, con los afamados HDI mejorando su rendimiento ecológico con la asistencia del filtro de partículas.