Peugeot 207

Quedan pocos meses para que podamos conducir el nuevo Peugeot 207, que llegará en primavera a España. Lo que ya sabemos es que es más grande, más modulable y posee un mayor equipamiento tecnológico.

Peugeot 207
Peugeot 207

A la hora de plantearse el diseño del coche, en Peugeot han seguido la pauta marcada con sus últimas renovaciones de producto. Así, han tomado la contrastada base estética del 206 y han trabajado sobre ella para adaptarla a los nuevos códigos estéticos de la casa gala, los mismos que ya se han aplicado sobre el 307 y el 407. El resultado es parecido a lo que sucedería si pudiésemos “inflar" el 206 y, después, moldearlo un poco.Quizá la parte más interesante del coche sea el frontal, que puede lucir dos imágenes diferentes en función del acabado. Así, todos incorporan ya la parrilla frontal con las ópticas y la forma de boca de tiburón que llevan los “hermanos mayores". Pero los acabados Sport y GT lucen en la parrilla unas agresivas rejillas reticuladas, mientras que los demás tienen líneas más suaves. Además, en los Sport y GT, los faros antiniebla van integrados dentro de la toma de aire frontal, mientras que en el resto de versiones los faros van a los lados de la parrilla.En la parte trasera, las mismas diferencias. Si la versión es “deportiva", líneas más fuertes y salidas de escape cromadas; si es “clásica", formas menos agresivas y escape disimulado.

En los laterales hay pocas alegrías. Destacan las aletas traseras, que reinterpretan las formas del 206, con zonas planas, y también la marcada línea de los hombros, igual de subrayada que en los 307.

En general, cabe hablar de una imagen refundida de un 206 y un 307, un término medio muy natural al que se le añaden algunos detalles propios, como los llamativos soportes de los retrovisores, que llevan integrado un piloto intermitente. Aunque la toma de contacto parisina no incluía conducción, hemos podido sentarnos en los coches y “palparlos". Aunque no ha pasado de ser algo epidérmico, sí hemos constatado que el coche tiene un alto nivel de acabados y una más que correcta factura. Los materiales elegidos son muy buenos para la categoría en que compite y, además, el ensamblado general no presenta fallas evidentes (hay varios tipos de tapicerías, colores y ambientes disponibles para cada acabado).
La ergonomía se ha cuidado bastante, acercando más los mandos al conductor y configurando una postura de conducción muy buena.
Menos nos han gustado las banquetas delanteras, algo cortas, especialmente las que llevan tapicería en cuero. En las plazas traseras hay sitio holgado para dos personas adultas. Tres tendrían más dificultades y, en todos los casos, siempre se echará en falta algo más de espacio libre al techo.
En Peugeot explican que, efectivamente, el coche es más bajo, por ejemplo, que un Citroën C3, con quien comparte plataforma. Pero añaden que es más alto que un 206.

En general, parece un acierto la modificación que ha sufrido esta plataforma, con un poco más de batalla y vías más anchas. Permite construir un interior bastante desahogado y un maletero que, con 270 litros de capacidad, se colocará entre lo mejor del segmento, aunque todavía superado por Renault Clio y Fiat Grande Punto.Como suele ser habitual en Peugeot, la gama del 207 es muy extensa, con un buen abanico de posibilidades para combinar mecánicas, carrocerías, acabados y equipamientos.Así, sobre la base de que todas las versiones (excepto la GT) se pueden elegir en tres y cinco puertas, Peugeot ha organizado la nueva familia en cuatro bloques. El primero, denominado polivalente, es el básico y, en principio, sólo incluye la versión Urban, que no está en la gama que vendrá a España inicialmente.
Por encima estará el bloque joven, que incluye la versión X-Line. Después, en paralelo, los bloque clásico (acabados XT y X-Pack, ambos en cinco puertas) y deportivo, con los acabados XS y XS Pack, en tres y cinco puertas. Los GT, que serán todavía más deportivos, se situarán aparte, como si fueran casi un bloque propio.Aunque todavía no están definidos los equipamientos de cada versión, si podemos adelantar que la dotación de serie es bastante completa. Muy completa, habría que decir, si tenemos en cuenta que seguimos dentro del segmento B, el de los teóricos utilitarios.En el equipo de fábrica hay, entre otras cosas, ABS, ASR, cinturones con pretensores pirotécnicos, anclajes Isofix, llantas mínimas de 15 pulgadas con neumáticos 185/65 R15, climatizador, equipo de radio con CD y mandos en el volante, ordenador de a bordo con pantalla monocromo y, una originalidad, ambientador incorporado.Después, las posibilidades de montar opciones son casi inagotables. Entre lo que se ha anunciado, destaca el ESP, llantas de hasta 17 pulgadas, climatizador bizona, techo acristalado, luces adaptativas de orientación lateral, monitorización de la presión de los neumáticos, ordenador de a bordo con pantalla en color y el sistema Rt3, que combina el equipo de sonido JBL, el cargador de CD, el navegador GPS y el teléfono.

Los GT tendrán sus propias especificaciones de equipamiento, incluyendo, de serie, el techo acristalado panorámico. Aunque todavía no se conocen los precios, en Peugeot aseguran que serán muy competitivos. No es descabellado pensar que se podrá comprar un 207 con un equipamiento muy interesante por una cantidad de dinero bastante ajustada. Lo sabremos antes de abril.A la hora de plantearse el diseño del coche, en Peugeot han seguido la pauta marcada con sus últimas renovaciones de producto. Así, han tomado la contrastada base estética del 206 y han trabajado sobre ella para adaptarla a los nuevos códigos estéticos de la casa gala, los mismos que ya se han aplicado sobre el 307 y el 407. El resultado es parecido a lo que sucedería si pudiésemos “inflar" el 206 y, después, moldearlo un poco.Quizá la parte más interesante del coche sea el frontal, que puede lucir dos imágenes diferentes en función del acabado. Así, todos incorporan ya la parrilla frontal con las ópticas y la forma de boca de tiburón que llevan los “hermanos mayores". Pero los acabados Sport y GT lucen en la parrilla unas agresivas rejillas reticuladas, mientras que los demás tienen líneas más suaves. Además, en los Sport y GT, los faros antiniebla van integrados dentro de la toma de aire frontal, mientras que en el resto de versiones los faros van a los lados de la parrilla.En la parte trasera, las mismas diferencias. Si la versión es “deportiva", líneas más fuertes y salidas de escape cromadas; si es “clásica", formas menos agresivas y escape disimulado.

En los laterales hay pocas alegrías. Destacan las aletas traseras, que reinterpretan las formas del 206, con zonas planas, y también la marcada línea de los hombros, igual de subrayada que en los 307.

En general, cabe hablar de una imagen refundida de un 206 y un 307, un término medio muy natural al que se le añaden algunos detalles propios, como los llamativos soportes de los retrovisores, que llevan integrado un piloto intermitente. Aunque la toma de contacto parisina no incluía conducción, hemos podido sentarnos en los coches y “palparlos". Aunque no ha pasado de ser algo epidérmico, sí hemos constatado que el coche tiene un alto nivel de acabados y una más que correcta factura. Los materiales elegidos son muy buenos para la categoría en que compite y, además, el ensamblado general no presenta fallas evidentes (hay varios tipos de tapicerías, colores y ambientes disponibles para cada acabado).
La ergonomía se ha cuidado bastante, acercando más los mandos al conductor y configurando una postura de conducción muy buena.
Menos nos han gustado las banquetas delanteras, algo cortas, especialmente las que llevan tapicería en cuero. En las plazas traseras hay sitio holgado para dos personas adultas. Tres tendrían más dificultades y, en todos los casos, siempre se echará en falta algo más de espacio libre al techo.
En Peugeot explican que, efectivamente, el coche es más bajo, por ejemplo, que un Citroën C3, con quien comparte plataforma. Pero añaden que es más alto que un 206.

En general, parece un acierto la modificación que ha sufrido esta plataforma, con un poco más de batalla y vías más anchas. Permite construir un interior bastante desahogado y un maletero que, con 270 litros de capacidad, se colocará entre lo mejor del segmento, aunque todavía superado por Renault Clio y Fiat Grande Punto.Como suele ser habitual en Peugeot, la gama del 207 es muy extensa, con un buen abanico de posibilidades para combinar mecánicas, carrocerías, acabados y equipamientos.Así, sobre la base de que todas las versiones (excepto la GT) se pueden elegir en tres y cinco puertas, Peugeot ha organizado la nueva familia en cuatro bloques. El primero, denominado polivalente, es el básico y, en principio, sólo incluye la versión Urban, que no está en la gama que vendrá a España inicialmente.
Por encima estará el bloque joven, que incluye la versión X-Line. Después, en paralelo, los bloque clásico (acabados XT y X-Pack, ambos en cinco puertas) y deportivo, con los acabados XS y XS Pack, en tres y cinco puertas. Los GT, que serán todavía más deportivos, se situarán aparte, como si fueran casi un bloque propio.Aunque todavía no están definidos los equipamientos de cada versión, si podemos adelantar que la dotación de serie es bastante completa. Muy completa, habría que decir, si tenemos en cuenta que seguimos dentro del segmento B, el de los teóricos utilitarios.En el equipo de fábrica hay, entre otras cosas, ABS, ASR, cinturones con pretensores pirotécnicos, anclajes Isofix, llantas mínimas de 15 pulgadas con neumáticos 185/65 R15, climatizador, equipo de radio con CD y mandos en el volante, ordenador de a bordo con pantalla monocromo y, una originalidad, ambientador incorporado.Después, las posibilidades de montar opciones son casi inagotables. Entre lo que se ha anunciado, destaca el ESP, llantas de hasta 17 pulgadas, climatizador bizona, techo acristalado, luces adaptativas de orientación lateral, monitorización de la presión de los neumáticos, ordenador de a bordo con pantalla en color y el sistema Rt3, que combina el equipo de sonido JBL, el cargador de CD, el navegador GPS y el teléfono.

Los GT tendrán sus propias especificaciones de equipamiento, incluyendo, de serie, el techo acristalado panorámico. Aunque todavía no se conocen los precios, en Peugeot aseguran que serán muy competitivos. No es descabellado pensar que se podrá comprar un 207 con un equipamiento muy interesante por una cantidad de dinero bastante ajustada. Lo sabremos antes de abril.