Los peligros de la alergia

Estornudos, tos, picor de ojos... la primavera ya está aquí. Muchos conductores se enfrentan en las próximas semanas a su peor pesadilla: circular en una época del año en la que sus facultades físicas están muy debilitadas. Y cada vez son más. No te pierdas nuestro reportaje y entérate de cómo prevenir los efectos de la alergia durante la conducción. Tú puedes ser el próximo paciente.

Los peligros de la alergia
Los peligros de la alergia

Los consejos prácticos nos alertan sobre cómo actuar para prevenir brotes alérgicos mientras conducimos, aunque poco ayudan a la hora de explicar el tratamiento adecuado para cada conductor en primavera o a la hora de advertirnos del peligro al que estamos expuestos por ingerir determinados medicamentos. Para obtener esta información, lo mejor que podemos hacer es acudir a consulta, sobre todo si el especialista que nos atiende presenta la experiencia en la materia que acredita el presidente de la Sociedad Española de Alergología e Inmunología Clínica (SEAIC), Antonio Peláez.Por lo tanto, ¿en qué medida considera la comunidad científica que la alergia afecta a la conducción?. La respuesta de Antonio Peláez es contundente: “Sin lugar a dudas, la alergia deteriora muchísimo la capacidad de conducción. En primer lugar, por una serie de síntomas de la propia enfermedad, como el picor de ojos o los estornudos, que dificultan la circulación; y en segundo lugar, debido a la influencia que tienen determinados medicamentos en la atención de los conductores y en su capacidad de reacción".Para el presidente de SEAIC, el desconocimiento de la enfermedad es el mayor problema al que se enfrentan muchos conductores y la principal causa de accidente de tráfico asociado a la alergia. De hecho, informes médicos señalan que sólo un 25 por ciento de los alérgicos son diagnosticados y tratados por un médico, mientras que casi ocho de cada 10 desconoce los efectos que la enfermedad provoca en la conducción. “La mayoría de ellos subestiman el peligro de la alergia y se automedican, una conducta muy arriesgada si hablamos de un paciente automovilista", asegura el doctor.Peláez basa su argumento en las contraindicaciones que presentan, a la hora de conducir, los populares fármacos utilizados contra la alergia y denominados antihistamínicos. “Este tipo de medicamentos, utilizados ya hace más de 40 años, producen mucha somnolencia y alteran las funciones psicomotoras, que son las que nos permiten analizar e interpretar una información y emitir una respuesta. Hay estudios que aseguran que la capacidad de conducción de un paciente bajo los efectos de estos fármacos es idéntica a la de una persona con un nivel de alcohol de 0,5 gramos en litro de sangre. Ahora bien, existen ya, desde hace algunos años, unos antihistamínicos de segunda generación que controlan los síntomas de la alergia, no tienen efectos secundarios y no interaccionan con el alcohol. Esto se debe a que no llegan hasta el cerebro". - Visión borrosa o doble.
- Dificultad para concentrarse o permanecer en alerta.
- Dificultad para recordar cómo se ha alcanzado el destino.
- Imposibilidad de mantener una trayectoria recta.
- Sorpresa ante la aparición de señales de tráfico (frenazos ante stops o semáforos).
Si notas cualquiera de estos síntomas, no sigas circulando y acude al médico. Una vez analizado el problema, ¿cómo debe actuar un conductor ante la entrada de la primavera? “Lo primero que tiene que hacer cualquier automovilista que sufra algún síntoma alérgico es acudir a un especialista para tratar cuanto antes la enfermedad. Es muy importante que el paciente le recuerde al doctor que es conductor habitual, para que éste le prescriba un tratamiento adecuado, generalmente basado en fármacos no sedativos. También es conveniente reforzar la medicación días antes de iniciar un viaje largo para evitar, en la medida de lo posible, los brotes violentos. Otros tratamientos que surten bastante efecto están relacionados con las vacunas, que tampoco ofrecen efectos secundarios para la conducción, aunque su resultado tarda bastante tiempo en llegar. No obstante, siempre es el médico quien debe decidir el procedimiento", destaca. Estas recomendaciones van dirigidas a todos aquellos alérgicos que, conscientes de su enfermedad, deciden acudir a un médico. Pero, ¿qué ocurre con los que se automedican? ¿Qué consejo les daría?, “En primer lugar, que lean detenidamente el prospecto de los fármacos, sobre todo para observar su influencia en la conducción. Es fundamental que se informen sobre los peligros derivados de los antihistamínicos y que, en caso de cualquier duda, consulten a un farmacéutico", asegura Peláez.La asociación SEAIC, en colaboración con la Dirección General de Tráfico (DGT), lanzó el pasado año por estas fechas una campaña informativa sobre cómo combatir la alergia. La distribución de cientos de dípticos se llevó a cabo coincidiendo con las vacaciones de Semana Santa.