Obama asegura que EE.UU. investigará la matanza en Afganistán hasta las últimas consecuencias

El presidente de EEUU, Barack Obama, ha asegurado hoy que su gobierno investigará 'hasta las últimas consecuencias' la matanza de 16 civiles afganos cometida el pasado domingo presuntamente por un soldado estadounidense en Kandahar.

'Estados Unidos se toma este asunto como si (las víctimas) fueran sus propios ciudadanos o sus hijos', ha dicho el presidente, que ha insistido en que se trata de un hecho 'vergonzoso e inaceptable'.

'Tenemos el corazón roto por la pérdida de vidas inocentes. Esto no es lo que somos como país y no representa a nuestras Fuerzas Armadas', ha expresado Obama en una breve comparecencia en la rosaleda de la Casa Blanca.

El presidente ha destacado que el Pentágono 'no escatimará esfuerzos para llevar a cabo una investigación completa' sobre el suceso y ha insistido en que los hechos serán examinados 'hasta el final'.

Según medios estadounidenses, el supuesto autor de la matanza es un sargento de 38 años que había llegado a Afganistán por primera vez en diciembre pasado, aunque contaba con experiencia previa en Irak.

Un funcionario del Departamento de Defensa ha declarado a la cadena CNN que el sargento era un francotirador de infantería entrenado para tirar a matar a unos 800 metros de distancia.

Durante su estancia en Irak en 2010 el militar sufrió un accidente de automóvil que le dejó una lesión cerebral traumática, según la cadena de televisión estadounidense.

No obstante, tras recibir tratamiento para sus heridas, fue autorizado a volver al servicio militar y destinado a Afganistán.

Tras la masacre se han multiplicado en Afganistán los llamamientos a que el presunto culpable sea juzgado en ese país.

Grupos extremistas advirtieron el lunes de que se vengarían por el asesinato de los 16 civiles.

Obama ha reiterado que, pese al incidente, que sucede después de que hace unas semanas soldados estadounidenses quemaran ejemplares del Corán, lo que originó otra oleada de protestas, EEUU no piensa cambiar su estrategia con respecto a Afganistán y mantendrá el calendario de retirada.

'Así que no hay que equivocarse: tenemos una estrategia que nos permitirá acabar con esta guerra. Estamos constantemente trabajando para la transición en la que los afganos están tomando la dirección. Y eso nos va a permitir traer nuestras tropas a casa', ha añadido el presidente de EEUU.

En septiembre unos 23.000 soldados regresarán a EEUU, después de los 10.000 que lo hicieron el año pasado, recordó Obama. Después de la retirada de esos 23.000, en Afganistán quedarán 68.000 soldados, según la Casa Blanca.

Precisamente, el portavoz de la Casa Blanca, Jay Carney, reiteró poco después en su rueda de prensa diaria que los objetivos 'estratégicos' de EEUU, que son estabilizar Afganistán y conseguir que no vuelva a ser el refugio de Al Qaeda, 'no han cambiado y no van a cambiar'.

Además, dijo que es 'falsa' la información que publica hoy The New York Times, que afirma que EEUU estudia acelerar la retirada de esos 68.000 soldados que quedarán en Afganistán a partir de septiembre, citando a funcionarios de la Casa Blanca, el Pentágono y el Departamento de Estado.