Navarro ultima su núcleo duro con más alcaldes y baraja no haya presidencia

El nuevo primer secretario del PSC, Pere Navarro, ha iniciado hoy los contactos para elaborar la nueva ejecutiva de los socialistas catalanes, una dirección en la que incorporará a más alcaldes de su confianza y en la que se inclina por dejar vacante la presidencia, en manos ahora de Isidre Molas.

Según fuentes socialistas consultadas por Efe, Navarro quiere contar con hombres de su total confianza, en concreto con los alcaldes de Granollers, Josep Mayoral, y de Cornellà de Llobregat, Antonio Balmón, que podrían ser viceprimer secretarios, junto a los cuales sumaría en un núcleo duro a Daniel Fernández como secretario de Organización.

Además de estos alcaldes metropolitanos, las fuentes consultadas dan por hecho que Manuel Bustos, alcalde de Sabadell, asumirá la secretaría de Política Municipal.

La alcaldesa de L'Hospitalet de Llobregat, Núria Marín, y el primer edil de Tarragona, Josep Félix Ballesteros, también se mantendrán en la ejecutiva, junto al exalcalde de Barcelona y actual concejal, Jordi Hereu. A éstos se podría sumar la primera edil de Santa Coloma de Gramenet, Núria Parlón, que continúa.

En cuanto a la presidencia del partido, un cargo honorífico que ha estado en manos de Isidre Molas, la opción más probable es que quede vacante, aunque algunos sectores apuestan por que pueda recuperarse más adelante y que la ocupe el dirigente que gane las futuras primarias a cartel electoral del PSC a la Generalitat, si es que no es elegido como tal Pere Navarro.

Un nombre que han barajado fuentes del partido para ocupar la presidencia o un nuevo puesto de presidente ejecutivo es el de Ros, cuya integración en la ejecutiva se considera vital en un PSC que debe hacer creíble a partir de mañana su renovación y la síntesis de su pluralidad.

Sin embargo, fuentes socialistas han apuntado que Navarro quiere evitar a toda costa un escenario complicado de gestionar: el presidente y el primer secretario del PSC enfrentados en unas primarias, si tanto él como Ros dan el paso de pugnar por la candidatura a la Generalitat.

En los últimos días de debate precongresual, Ros dijo no descartar que él termine finalmente fuera de la nueva ejecutiva, porque para formar parte de ella quiere poder sentirse cómodo con el rumbo que tome el partido.

Navarro, por su parte, se ha esforzado en garantizar públicamente a Ros esta comodidad y, sobre todo, que será neutral si se enfrentan en las primarias, ya que, en ese escenario, Navarro abandonaría temporalmente sus funciones como primer secretario en aras de la transparencia del proceso.