Iceta (PSC) tira la toalla y pone su futuro político en manos de la nueva cúpula

El viceprimer secretario y portavoz del PSC, Miquel Iceta, ha confirmado este jueves por la noche que tira la toalla y no presentará candidatura para liderar el PSC, y ha puesto su futuro político en manos de la nueva dirección del partido.

En declaraciones a los periodistas tras reunirse con militantes barceloneses, Iceta ha recalcado que en ningún caso deja la política, y que su objetivo es trabajar para que el PSC vuelva a ser el gran partido de Cataluña y alternativa a la actual mayoría de CiU.

En la conferencia, también ha resaltado que él está firmemente comprometido por una renovación del partido, tanto a nivel catalán como a nivel local en Barcelona: 'La integración y los cambios eran y son mi bandera', y ha constatado que, en estos momentos, su hasta ahora rival, Pere Navarro, es quien representa esta necesaria transformación.

EL PAPEL DE LAS PRIMARIAS

Ha asegurado que trabajará para que haya una candidatura unitaria en el congreso de este fin de semana, y ha lanzado una advertencia: lo que está en juego en este congreso tampoco es el liderazgo del partido, ya que el primer secretario que se elija tendrá un papel provisional, encabezando 'una etapa que será de transición hasta que el nuevo liderazgo del socialismo catalán sea establecido mediante unas primarias' abiertas a la ciudadanía, como ocurre en Francia.

Iceta ha asegurado que el cambio en el partido debe ser real, no sólo de caras, y ha asegurado que ahora se propone 'empujar' para lograrlo desde la posición que considere oportuna la nueva dirección del partido.

'Lo importante es que el congreso vaya bien, no al papel que yo tenga. Yo ayudaré siempre, desde donde sea', ha añadido.

Iceta ha indicado que dividir el PSC en este congreso entre 'capitanes' y un supuesto sector más 'catalanista' sería un error, como también sería un 'malgasto' que la única cuestión trascendente del congreso sea la recuperación o no del grupo propio en las Cortes, inclinándose por una solución intermedia: un grupo federal compartido con el PSOE donde el PSC pueda tener voz propia en temas que afecten a Cataluña, sin romper con ello con el PSOE en caso de disidencias.