Alarmante índice de consumo de drogas entre los conductores

Los primeros resultados del proyecto "ROSITA" revelan que el número de conductores que presentan un índice de alcohol por encima de lo permitido es muy próximo al de los que consumen drogas.

En el XVIII Congreso de la Academia Internacional de Medicina Legal celebrado en Santiago de Compostela, se han dado a conocer los primeros resultados del proyecto "ROSITA" (Road Site Testing Assessment). Este estudio consiste en la realización de controles para conocer el consumo de drogas en la conducción a través de análisis de saliva. El proyecto está dirigido por Alain Verstraete, de la universidad de Gante, y tiene diversos objetivos, como determinar los mejores métodos y equipamientos para detectar la presencia de drogas y fármacos o evaluar qué productos tienen influencia negativa en la capacidad para manejar vehículos.
El responsable del proyecto en Galicia, Manuel López Ribadulla, catedrático de Toxicología, señaló durante el congreso la eficacia de el método utilizado, tanto por su precisión como por su inmediatez, ya que evita los análisis de orina y sangre. Los primeros resultados del proyecto reflejan que el número de conductores que consumen alcohol por encima de los niveles permitidos es bastante aproximado al número de los que consumen drogas. Según López Ribadulla, en Galicia se ha demostrado que el consumo de drogas detectado en controles preventivos se sitúa entre un 3 y un 4 por ciento, índice que se aproxima al de alcohol, situado en un 5 por ciento. El consumo de cannabis y de antidepresivos se sitúa tras el alcohol.
Los especialistas europeos que toman parte en el proyecto transmitirán varias recomendaciones a la Unión Europea con el objeto de que se elabore una directiva sobre este asunto.
En el Congreso también se manifestó la necesidad de establecer controles en carretera y campañas publicitarias para concienciar a la sociedad del peligro que supone conducir bajo los efectos de las drogas.
Los resultados del estudio coinciden con los obtenidos por la DGT y la Delegación del Gobierno para el Plan Nacional sobre Drogas, cuyos análisis afirman que, durante 1999, se detectó presencia de alcohol, drogas o ambas en el 42 por ciento de conductores y peatones fallecidos en accidentes de tráfico que fueron analizados.