Hacia unos menores plazos de entrega de los automóviles

Menos esperas a la hora de recibir un automóvil tras la compra de éste.

La tardanza en la entrega de los turismos en los concesionarios desde que se da la orden de compra es uno de los principales problemas que preocupan a las marcas automovilísticas. Para remediarlo, Ford está aplicando un sistema conocido como ILVS que incrementa la productividad y reduce el coste del sistema de producción. El ILVS (siglas en inglés de suministro de vehículos en línea) dota a los proveedores de la información necesaria para entregar las piezas mediante el "just in time" y llegar a construir el vehículo correcto (aquel que se ha encargado en el concesionario) el día correcto. La secuencia de demanda de piezas se transmite a los proveedores y a la planta con seis días de antelación. En la actualidad, en Ford tardan entre diez y quince días entre la petición y la entrega del coche y el objetivo apunta a conseguir que esta plazo se reduzca hasta los seis días. Este sistema, que con toda seguridad aumentará la satisfacción del cliente, incide también en la restauración de la secuencia de pinturas y montaje y reduce la disciplina de construcción, lo que repercute en el buen funcionamiento de la planta. El sistema alcanzaría su grado de idoneidad si se cumpliera, además, el first in-first out, es decir, que el primer vehículo que entre al ensamblado con esta secuencia sea el primero en salir de ella montado.