Magnífico doblete para McLaren en Barcelona

El 44 Gran Premio de España de Fórmula 1 ofreció un espectáculo magnífico. La estrategia de Ferrari, a priori muy buena, se truncó tras dos dos caóticas entradas en boxes. Desbaratado el plan italiano, los McLaren impusieron su potencia y coparon el podio de Montmeló.

Magnífico doblete para McLaren en Barcelona
Magnífico doblete para McLaren en Barcelona

En uno de los circuitos más rápidos de la Fórmula 1, la estrategia de carrera era vital. Ferrari la diseñó bien, pero luego no supo llevarla a la práctica. McLaren sí que lo hizo y además se aprovechó de los errores de su gran rival. Bajo la bandera de cuadros, Hakkinen ganó con 16 segundos sobre Coulthard, 29.100 sobre Barrichello y 37.300 sobre Ralf Schumacher. El líder del Mundial sólo pudo ser quinto a más de 47 segundos del ganador de la prueba. El sexto puesto fue para Frentzen, de Jordan. Este resultado vuelve a poner emocionante el Mundial, que sigue encabezado por Schumacher con 36 puntos, pero que ya tiene a Hakkinen con 22.
Parecía que Michael Schumacher iba a ganar después de una salida espectacular. Ligero de combustible, el alemán apostó por una estrategia de dos paradas en boxes. Así, el Ferrari salió como una bala y marcó varias vueltas rápidas seguidas. Rápidamente puso más de tres segundos sobre Hakkinnen y luego se defendió hasta las paradas.
El alemán entró primero en boxes, a la altura de la vuelta 24. Invirtió sólo 7,3 segundos en la parada y salió tan rápido que atropelló a uno de sus mecánicos que tuvo que ser evacuado al hospital. Volvió a la pista segundo y un par de vueltas después repostó Hakkinen. Cuando el finlandés se reincorporó, no fue capaz de hacerlo por delante de Shumacher, con lo que todo siguió igual. Desde ese momento, y hasta el siguiente repostaje, Hakkinen se dedicó a lanzar ataques furibundos contra un Michael Schumacher que se limitó a defenderse.
La segunda entrada en boxes, bastante temprana, fue en el giro 41, decidió la carrera. Entraron a la vez Hakkinen y Schumacher. El primero tardó en repostar y cambiar ruedas algo más de 7 segundos.. El alemán, 17, 5. Un atasco en la manguera de combustible echó por tierra toda la operación. Cuando Schumacher volvió a pista ya estaba esos diez segundos por detrás. El de Ferrari parecía un tanto sorprendido porque no lograba recuperar terreno. Tanto fue así que en la curva del Estadio, al final de la recta de tribunas, un asombroso Coulthard le rebasó por afuera y le relegó a la cuarta plaza dejando al circuito con la boca abierta. Después, tras casi chocar con su hermano en una extraña maniobra, el líder del Mundial tuvo que entrar de nuevo a cambiar ruedas y perdió definitivamente sus opciones. Al parecer un neumático se quedaba sin presión.Desde ese momento no hubo historia. Hakkinen se fue solo adelante ante el delirio de los muchos finlandeses desplazados a Barcelona. Por detrás, Coulthard se defendía bien de Barrichello y se aseguraba la segunda plaza.
Si hubo una actuación sorprendente, esa fue la de Ralf Schumacher. Saliendo desde la quinta posición de la parrilla, el joven alemán apuntaba alto. Tuvo la mala suerte de averiar su coche, con lo que no le quedó más remedio que correr con el "muleto", el de reserva. Aún así, salió de forma impresionante y se colocó tercero por delante de un conservador David Coulthard. Tras el segundo reportaje, el escocés logró tomar la delantera y se mantuvo por delante para irse a la caza de Michael Schumacher, que se produjo de forma brillante. Después de esa maniobra aún tuvo fuerzas para dejar atrás a Barrichello y entrar segundo en la meta.
Otro destacado fue el debutante Jasón Button, que llevó su Williams en la sexta plaza hasta que, a falta de cuatro vueltas para el final, un fallo de motor le dejó fuera.
Marc Gené no cuajó la buena actuación que el quería. Salió el antepenúltimo y parecía que podía remontar, pero luego tuvo que entrar a Boxes cuatro veces, una de ellas con problemas mecánicos. Aún así, logró terminar y acabó decimocuarto a dos vueltas de Hakkinen, su mejor resultado este año y, según él, su mejor carrera en la Fórmula 1. Su compañero de equipo, Mazzacane, lo hizo peor.
Pedro Martínez de la Rosa sufrió uno de esos días que no se le desean a nadie. Después de hacer una buena salida en la que adelantó a cuatro coches, llegó a la primera curva muy apurado. Allí se encontró con Alesi que le ofreció el interior. Cuando el español se dispuso a meterse por allí, resultó cerrado por el francés. El impacto dejó fuera a Alesi y tocado al Arrows de Pedro Martínez que se salió muy poco después.Pero eso no era lo peor, al fin y al cabo, un choque es algo propio de la carrera. Lo peor le sucedió en la tarde del sábado. Después de lograr una magnífica novena plaza en la parrilla, los comisarios de la FIA detectaron una irregularidad en su coche. En concreto, aseguraron que la gasolina que había empleado para la clasificación no era la misma que había declarado el jueves al llegar a las primeras verificaciones técnicas. Resultado: relegado al último lugar de la salida. Toda la tarde pasó Arrows entre apelaciones. Al final podía haber salido desde la novena posición, pero se arriesgaba a una multa de 60 millones de pesetas si finalmente se demostraba el cambio de combustible, amén de perder los puntos que hubiera ganado.
El equipo inglés asegura que el problema de la gasolina no era que fuese diferente, sino que los bidones que la contenían habían estado ocupados antes por otro líquido que altero la composición del combustible. Mala suerte otra vez en Barcelona para Pedro Martínez.