España se queda sin ver la Fórmula Uno

Una vez más, los aficionados a la Fórmula Uno se quedan sin poder seguir el Campeonato Mundial de la especialidad por televisión. TVE, TV3 en Cataluña y la plataforma digital Canal Satélite no retransmitirán las carreras.

España se queda sin ver la Fórmula Uno
España se queda sin ver la Fórmula Uno

Durante los tres últimos años, la llegada a la Fórmula Uno de Pedro Martínez de la Rosa, Marc Gené y Fernando Alonso había permitido a los espectadores españoles seguir el certamen de la especialidad mediante algunas de las televisiones que operan en nuestro país.

Sin embargo, han regresado los tiempos de hacerse con una antena parabólica para captar la señal de aquellas cadenas extranjeras que sí retransmitan los Grandes Premios que se celebren en 2002, pues TVE, TV3 en Cataluña y los canales de pago de Canal Satélite no desembolsarán el elevado precio de los derechos de televisión que pide el grupo Kirch. La compañía de comunicación alemana ha encarecido el coste del Mundial de la especialidad, exigiendo 10 millones de dólares -1.850 millones de pesetas- por tres años.

Recientemente, el magnate germano ha rebajado a la mitad sus pretensiones económicas, pero el precio continúa siendo desmedido para TVE e incluso para Canal Francia, que no ha renovado su contrato, por lo que Canal Satélite, que lleva cuatro años retransmitiendo la F1, no ofrecerá ninguna imagen en 2002.

Aún queda la posibilidad de que alguna cadena privada acepte la oferta de Kirch. De lo contrario, más de un millón de españoles, que han seguido fielmente cada carrera, se quedarán sin ver el certamen de la especialidad, lo que no ocurrirá en Italia, Francia, Portugal o Alemania, donde algunas emisoras ofrecerán las imágenes de las pruebas en directo.

Este acuerdo ha sido posible gracias a las negociaciones que las escuderías del Mundial han llevado a cabo con el grupo de comunicación alemán. Los equipos temían que Kirch aprovechara sus televisiones para emitir sólo mediante el sistema de "pago por visión", lo que podría acabar con uno de los deportes más seguidos del mundo.

Kirch, que atraviesa graves problemas económicos, podría vender sus acciones a los constructores de la F1, como Ferrari, BMW, Ford, DaimlerChrysler y Renault, que ya han amenazado con crear un campeonato paralelo en 2008.

En cualquier caso, un portavoz del grupo de comunicación ha desmentido que Bernie Ecclestone ("patrón" de la Fórmula Uno) haya presentado una oferta de 800 millones de euros para hacerse con los derechos de retransmisión de las pruebas, como aseguró la semana pasada el diario alemán "Süddeutsche Zeitung".