La única duda de la jornada de hoy era saber cual de los dos integrantes de la escudería de Reinhold Joest se hacía con la "pole position". Finalmente, fue el prototipo con el número 2 en el chasis, manejado por Aiello, Pescatoni y Capello, quien, a las órdenes de este último, quien logró desbancar del primer puesto de la parrilla a los vigentes campeones de la prueba, Pirro, Kristensen y Biela.
La batalla por la "pole" entre los dos Audi oficiales permitió que ambos coches batieran el récord del circuito que estaba precisamente en poder del Infineon número 2, desde el pasado 6 de mayo, fecha en la que recorrió una vuelta en 3'32''742. Al final, Capello detuvo el crono en unos espectaculares 3'32''458.
Por detrás las cosas variaron poco. En el tercer y cuarto lugar se mantuvieron los mismos vehículos que ocuparon esas posiciones en la jornada del miércoles: el Infineon R-8 no oficial del equipo Champion Racing y el Dome-Judd, del conjunto Racing for Holland.
Quinto fue el cuarto de los Audi, el prototipo de Johansson, Lemarie y Coronel que, tras sus irregulares actuaciones en los anteriores entrenamientos, demostró que tiene uno de los coches más potentes de la carrera y que podría ser una alternativa a los otros tres Infineon por la victoria final y al coche holandés, si los problemas con la caja de cambios les respetan.
Más atrás destaca el buen funcionamiento del tercer Chrysler Viper, el del conjunto Playstation, que concluyó sexto, dejando en evidencia, por segundo día consecutivo a los otros dos Viper presentes en Le Mans que terminaron lejos de sus tiempos.
Pescarolo, Panoz y Ascari acabaron en las últimas posiciones y de los seis coches que, en conjunto, suman estas tres escuderías sólo un prototipo de la primera, el pilotado por Bourdais, Bouillion y Redon, salvó los muebles, concluyendo en la decimotercera posición a más de siete segundos del líder.
Los dos Bentley y los dos Cadillac Northstar se situaron en posiciones intermedias, junto al Courage C60 Judd, de la escudería SMG, unos lugares que si bien no son para lanzar campanas al vuelo, sí que les permitirían aprovechar fallos mecánicos o salidas de pista de los coches de los lugares altos de la parrilla. En la categoría LMP 675, los MG ratificaron su actuación del miércoles y demostraron que su primer puesto no fue un espejismo. Ambos batieron sus cronos de la primera sesión de entrenamientos, marcando registros, incluso, propios de sus hermanos mayores, los prototipos de la clase LMP 900.
El primer MG Lola, con Reid, Hughes y Kane a bordo, terminó en un honroso decimocuarto puesto final, mientras que su compañero, conducido por Blundell, Bailey y McGarrity, acabó tres puestos por detrás.
El equipo del único español presente en la carrera, Jordi Gené, corroboró sus opciones al triunfo final y su Reynard Volkswagen continuó siendo el primer coche en su categoría por detrás de los MG. En el resto de clases, la situación apenas varió respecto a la clasificación del viernes. Dentro de los Gran Turismo S, el Saleen de Konrad, Gavin y Borcheller logró el mejor tiempo por delante del Corvette de Fellows, Pruett y O'Connell.
En la categoría de los GT de serie, el único Callaway volvió a ser superior a sus diez Porsche 911 GT3-RS y continuó al frente de la legión germana.
