La VIII Semana Mapfre de Seguridad Vial se ha puesto en marcha en León con el objetivo de concentrarse en los jóvenes y hacerles ver el peligro que asumen cuando salen en coche a divertirse los fines de semana. El Instituto Mapfre ha elaborado dos importantes estudios en los que describe los hábitos de los conductores de entre 16 y 25 años, un colectivo que sólo incluye al 15 por ciento del total de conductores, pero que acapara un 31,4 por ciento de las muertes en siniestros de circulación. De los datos que aportan estos trabajos se deduce que cada fin de semana muere una media de 20 jóvenes en las carreteras, mientras que otros 50 sufren lesiones que les obligan a depender de una silla de ruedas para el resto de su vida.
La escalofriante dureza de esta afirmación contrasta con la poca importancia que los chicos menores de 25 años dan a los peligros del coche o la moto. Mapfre ha presentado otro estudio en el que se recogen los datos cosechados en una serie de encuestas a chicas y chicas de estas edades. Un 47 por ciento de ellos asegura que es capaz de conducir sin problemas después de haber bebido. Incluso un 29 por ciento asegura que confía en un amigo conductor aunque sepa que ha tomado alcohol. Por último, un 24 por ciento de los preguntados reconoce que en sus viajes es “corriente" que el conductor haya bebido lo suficiente como para tener un percance.
Esta aparente despreocupación está detrás de los 1.306 muertos en accidente que registró este segmento de la población en 2000. Un 77,4 por ciento de los fallecidos, 1.011 víctimas, eran varones. Las zonas urbanas registran la mayor cantidad de choques y siniestros, pero casi un 80 por ciento de las muertes se produce en carreteras abiertas, donde las velocidades son más elevadas y los riesgos, mayores. Mapfre quiere lanzar una campaña especialmente poderosa para que llegue a la mayor cantidad posible de chicos. Bajo el lema “Este fin de semana, tú decides", el programa recorrerá 17 ciudades en los próximos meses llevando a la población joven un mensaje de cordura y prudencia. Entre las acciones informativas que llevará a cabo Mapfre en esta campaña destacan las charlas “por sorpresa" que darán a los jóvenes varias personas que han sufrido accidentes de tráfico. Se busca que la visión de los efectos de una imprudencia actúe como sobre la idea que los chicos tienen de los peligros al volante.
