El uso del claxon, prohibido en Madrid

El ruido que genera el automóvil será perseguido de forma más severa en Madrid con una nueva ordenanza municipal. De esta manera, el uso del claxon queda prohibido, excepto en caso de emergencia.

La Junta de Gobierno del Ayuntamiento de Madrid ha aprobado el texto definitivo de la nueva Ordenanza del Ruido que sustituirá a la anterior Ordenanza General de Protección del Medio Ambiente de 1985. Las principales novedades de esta nueva normativa son el incremento importante de las sanciones y la prohibición del uso del claxon por parte de los automovilistas, excepto en caso de emergencia. Respecto al primer punto, las multas por contaminar acústicamente la ciudad, éstas se elevan de forma considerable. Así, las sanciones leves se castigarán con multas de hasta 600 euros (en la actualidad, la cuantía máxima es de 300 euros); las faltas graves se penan entre 601 y 12.000 euros (hasta ahora, entre 301 y 600 euros); y las infracciones muy graves pueden situarse entre 12.001 y 300.000 euros (hasta la fecha, entre 601 y 12.000 euros). El claxon será otro de los grandes perseguidos por las autoridades municipales. Según la nueva ordenanza, su uso quedará muy restringido, quedando únicamente permitido su utilización en caso de emergencia: para evitar un atropello o una colisión. Los demás supuestos, serán susceptibles de ser multados. Así, tocar el claxon en un atasco o para alertar al dueño de un vehículo en doble fila puede ser castigado con una multa de hasta 600 euros. Esta cuantía, finalmente, se ha reducido gracias a la aprobación de una propuesta del edil socialista Pedro Zerolo, ya que el Gobierno municipal abogaba porque la sanción fuera de hasta 12.000 euros. ¿Y cómo deberemos actuar ahora para lograr sacar nuestro coche cuando tenemos otro en doble fila que nos lo impide? La única solución que evitará que nos ganemos una infracción monetaria es la de avisar a la grúa y esperar que retire el vehículo que nos molesta. El vicealcalde, Manuel Cobo, ha señalado a la prensa que, con esta norma, la ciudad será “mucho más acogedora y amable". Cobo ha resaltado el hecho de que la ordenanza se ha logrado gracias “al consenso de todos, dado el alto porcentaje de enmiendas aceptadas" (30 de las 46 presentadas por PSOE e IU) y ha ratificado “que no tenemos ninguna intención de que aumente la recaudación, lo que queremos es que se cumplan las normas, que es lo que quieren los ciudadanos".