Farruquito no paró, aunque se lo pidieron

Jorge Rubio, El Canastero, acompañaba a Farruquito cuando éste atropelló a un hombre de 35 años, causándole la muerte. Rubio, según sus declaraciones, pidió al bailaor flamenco que parara tras el accidente, pero el artista se asustó y decidió emprender la huida.

El Canastero iba en el asiento del acompañante del BMW que conducía Juan Manuel Fernández Montoya, Farruquito, cuando éste atropelló mortalmente a un hombre de 35 años el pasado mes de septiembre. Varios testigos presenciales de los hechos han declarado que el bailaor marchaba a una velocidad “descomunal" y “nunca vista", aunque, según El Canastero, el vehículo circulaba a unos 60 ó 70 kilómetros por hora.Rubio, que ha prestado declaración en el juzgado de Instrucción número 15 de Sevilla, ha afirmado que, tras el suceso, pidió al artista que detuviera el coche, aunque Farruquito decidió huir, ya que estaba asustado. Ambos prosiguieron la marcha hasta la parcela de una urbanización, donde dejaron el automóvil siniestrado. Asimismo, El Canastero ha apuntado que algunos testigos los insultaron al ver que no socorrían a la víctima. Según Rubio, Farruquito es su “hermano y compadre", por lo que no lo denunció tras el atropello. Aún no se le ha imputado delito alguno, aunque El Canastero podría ser acusado de encubrimiento y omisión del deber de socorro. La juez Silvia Soto, que instruye el caso, también ha tomado declaración a un tío del bailaor, Antonio Fernández Flores, quien se encargó de recoger el BMW –una vez reparado- de un taller de Málaga. Por su parte, Farruquito, que reconoció los hechos el 28 de marzo, ha mostrado públicamente su arrepentimiento. Si quieres saber más sobre esta caso, pincha en el enlace que aparece bajo estas líneas. La Audiencia de Valladolid ha confirmado la condena de un año de cárcel y privación del permiso de conducir durante dos años y medio para un hombre que provocó un accidente en el que murieron dos personas. Así, se confirma la sentencia del Juzgado de lo Penal número 2 de Valladolid, que sancionó al automovilista por dos delitos de homicidio imprudente, si bien le absolvió de un delito contra la seguridad del tráfico.

La Audiencia ha mantenido la imposición de las penas al acusado, aunque ha rebajado en 13.000 euros la indemnización que debía pagar, que ahora asciende a 100.000 euros.

Los hechos ocurrieron el 23 de noviembre de 2002, en la N-601, a la altura del municipio vallisoletano de Villanubla. Al parecer, el acusado se quedó dormido mientras conducía y su coche invadió el carril contrario al de su marcha, chocando contra otro vehículo en el que viajaba un matrimonio de 60 años, que murió en el accidente. La resolución judicial ha descartado que la conducta del sancionado se debiera al consumo de alcohol. Los Mossos d’Esquadra han abierto diligencias penales a un conductor alemán que resultó herido tras sufrir un accidente el pasado domingo. Alfred Franz, de 52 años, fue trasladado en estado grave a la Unidad de Cuidados Intensivos del Hospital Clínico de Barcelona. Allí se le practicó un análisis de sangre que reveló una tasa de alcoholemia de 2,25, nueve veces superior al límite permitido por la ley.

La policía autonómica ha confirmado que esta cifra ha sido la más alta registrada jamás en Cataluña. En otras circunstancias, habría comportado la detención del automovilista, que no fue arrestado por encontrarse herido.