Seat ya trabaja en los nuevos León y Toledo

Los modelos León y Toledo de Seat, dos coches de gran aceptación en los mercados europeos, ya tienen fechas de renovación. En la firma española se trabaja con cierto secretismo en estas novedades, pero han trascendido los datos más interesantes.

Parece que el próximo León será impactante.
Parece que el próximo León será impactante.

Por lo que se ha podido saber, el nuevo Toledo está ya en fase de desarrollo. Codificado internamente como SE351, el coche estará listo a finales de año, con lo que es posible que se deje ver en el Salón de París, en septiembre. De acuerdo con los datos aportados por la agencia EFE, utilizará la plataforma del Altea.Por su parte, el León, llamado SE-350 en el código de la firma, aparecerá durante el primer trimestre de 2005. Aunque en Seat no muestran nada de los coches, se sabe que rezumarán el nuevo espíritu deportivo que luce la marca de Barcelona. En especial el León, del que los rumores dicen que es tan bonito que en Audi se han molestado, porque hace sombra al A23.

Cuando llegue el León, Seat tendrá renovada toda la gama que fabrica en Martorell y habrá dejado de montar ya el pequeño Arosa, que vive actualmente su último año de producción. Esta renovación de los Toledo y León supone una inversión de 400 millones de euros, una cantidad de dinero que tranquiliza a la plantilla de Seat, preocupada por su futuro después de que Volkswagen (propietario de la marca) anunciara recientemente un plan de ajuste de costos que supone el despido de 5.000 personas en todo el mundo.
También sirve para calmar los ánimos después de que la semana pasada se supiera que Seat estudia recortar 600 empleos en Barcelona si no se logra mayor flexibilidad laboral. Este excedente se producirá cuando el Arosa abandone las cadenas de producción, con lo que Seat necesita reajustar los ritmos de trabajo y contar con una plantilla capaz de amoldarse a esos reajustes. Si no lo consigue, le sobrarán casi 600 puestos de trabajo. Los sindicatos negocian duramente las condiciones de este reacomodo.La empresa de origen español, que cuenta con 13.000 trabajadores, vive un momento de cierto estancamiento, porque todavía no ha empezado a distribuir los nuevos Altea y tiene los Arosa en franco retroceso. Por eso, hasta que el León y el Toledo no demanden toda la fuerza productiva de las factorías, se producen excedentes de mano de obra. La empresa ha advertido que puede retirar la bolsa de horas que había pactado con la plantilla en 2003 y que también retirará el llamado “contrato relevo", una modalidad de contratación de personal joven para relevar a los más veteranos. Se esperaba que entrasen 7.000 nuevos obreros, pero, ahora, estas contrataciones están paralizadas.